i guess this Is love.. (Kuroken)

18.

Detrás de la puerta de encontraba kenma, aterrado de lo que acababa de pasar, ¿Su mejor amigo se le confesó? Kenma no podía procesarlo, posaba su cabeza en sus rodillas, mientras su mentón estaba en sus brazos, solamente miraba hacia enfrente con los ojos demasiado abiertos, su corazón latía muy fuerte sus mejillas estaban demasiado calientes, se sentía ligero,su estómago no dejaba de dolerle. Empezó a respirar cada vez más lento, estaba demasiado agitado.

-ahhgh- separó sus brazos y cabeza de sus piernas, para proceder a estirarlas. Al recargar su cabeza en la puerta sintió como su corazón se calmaba cada vez más.
-no puedo con esto..- susurro. -por que a mí..- con una mirada nerviosa y triste empezó a morder sus uñas. - [kuroo por qué me haces esto]- las mordía demasiado fuerte. -auch- dijo al jalar un pedazo de su piel. Su dedo estaba sangrando.

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Paso 1 hora y a Saito ya le habían reportado que uno de sus amigos estaba encerrado en el baño, así que se dirigió para allá.

Tocó la puerta. -¿kenma Kun?- no hubo respuesta, así que fue en busca de la llave.

Kenma se levantó rápido al ya no escuchar a nadie, abrió lentamente la puerta y salió de ahí. Cuando empezó a caminar más rápido choco con alguien -[ mm un chico alto... ¿Alto? Y.. ¿Pelinegro? MIERDA!] -

-kenma- el pelinegro dijo emocionado y algo triste. -por fin te encuentro, perdón por..- kuroo bajo la mirada a la altura de las manos del menor. -tu dedo se ve mal y tu uña está rota.. vámonos..- dijo agarrando del brazo al teñido, este al sentir el toque de la mano de kuroo se hizo a un lado.

-hmm- volteo hacia el otro lado y asintió. -[ UGHH! kuroo idiota, no te quiero ver ahora, pero si no quiero que pienses o que las cosas sean raras!!]- empezó a caminar.

-claro..- susurro el pelinegro. Los dos caminaron hasta la salida, estaban en un silencio demasiado incomodo. -¿Estará mal que nos vayamos sin despedirnos?-

-no quiero estar más aquí.. pero tienes razón, deja le marco..-  agarro su teléfono y empezó a llamar a la rubia.

-kenma Kun! Hola!-
-saito.. ya me.. nos vamos ¿Podrías venir a la entrada?-
-S-si-

La rubia llegó después de 5 minutos, al llegar noto el gran silencio que reinaa entre ellos dos y el como se evitaban las miradas. -hola chicos- acercó un plato con una rebanada de pastel. -se que está gigante pero no había más platos, así que les puse un pedazo para los dos- sonrió gentilmente. Kuroo agarro el plato.

-gracias, ya nos vamos Saito, hasta luego- kuroo de una forma "falsa" sonrió y salió de a habitación.

-adios saito-

-kenma Kun.. ¿Quieres que hablemos después?-

... Kenma abrió lo ojos al oír eso, solamente negó con la cabeza y se retiró mientras agitaba su mano en forma de despedida.

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-hola mi niño-
-hola mamá-
-tu padre y yo tuvimos que venir con tu abuela, está muy enferma así que nos quedaremos toda la semana con ella-
-ehh ¿Y yo?-
-tranquilo, la señora kozume dijo que no había problema de quedarte con ellos-
-umm..-
-¿Paso algo?-
-¿no podría quedarme en la casa mejor?-
-hay mi niño, pero imagina la oportunidad que tienes de confes...-
- AHAJAJA... ESTA BIEN MAMÁ ADIOS SALÚDAME A LA ABUELA!- kuroo colgó.

-[ no quiero que kenma se ponga más incomodo..]- kuroo guardo su teléfono.

-supongo que dormirás conmigo..- dijo con la cabeza baja, en todo el camino fue lo único que dijo.

-si..-

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