Sendero de espinas

Capítulo 6

La luna se alza en el cielo, proyectando una luz tenue que apenas ilumina el bosque oscuro y denso a mi alrededor. Me muevo con cautela, cada paso es un desafío, y la sensación de ser observada se intensifica. Inhalo profundamente, tratando de calmar el latido frenético de mi corazón, pero la inquietud no se aleja. Una sombra se desliza entre las ramas, y una presencia palpable se cierne sobre mi.

—Has llegado muy lejos, princesa —dice, su tono lleno de un retorcido placer—. Pero no te engañes; el bosque es un lugar de oscuridad, y aquí, la verdad se convierte en una melodía sombría.

Reconozco esa voz; es  la misma que susurró, en momentos de soledad que era responsable de la muerte de aquella chica, que nadie podría salvarme de la culpa que me sigue.

Miro hacia arriba, donde la silueta oscura se asoma entre el follaje, desafiándome. Sus ojos, dos destellos rojos , me clavan la mirada, llenos de un conocimiento antiguo y perturbador. Me siento tan pequeña bajo su influencia, como si cada aspecto de mi ser estuviera a merced de esa ominosa voz.

—¿No lo sientes, princesa? Si eliges quedarte aquí, el bosque te robará hasta lo más profundo de tu ser —dice con voz profunda y resonante, como el eco de un trueno lejano.— Tampoco es como si tuvieras más opciones — se burla con descaro para luego soltar una carcajada que hace retumbar mis tímpanos.

No podía ser cierto, era él . El era el asesino. Una neblina de enojo se apoderó de mi ser . No entendía cómo después de todo lo que había tenido que pasar por su culpa, tenía la demencia de hablarme con ese desenvolvimiento, como si me conociera de toda una vida . No entendía cómo era capaz de meterse en mi mente quebrada y apoderarse de ella como si fuese un juguete.

—¡Tú fuiste el responsable de su muerte! —grité , con la indignación surgiendo de mi interior. Las lágrimas empañan mis ojos, pero empujo el dolor hacia un lado. —¿Por qué me persigues?

De repente empieza a susurrar con un tono que  se vuelve más grave y seductor.

—No soy tu enemigo, sino tu espejo. Déjame llevarte a el miedo y a la desolación, corromperé todo tu ser hasta hacerte añicos para así poder reconstruirte a mi forma. La oscuridad no necesita luchas; solo necesita que te rindas. ¿Lo ves? La culpa que llevas es la puerta que abrirá mi reino dentro de ti.

—No permitiré que me arrastres —afirmo , levantando la cabeza con valentía. La sombra vuelve a reír , un sonido profundo y oscuro.

—¡Cómo puedes estar tan segura!. La oscuridad y la culpa son como un veneno, y tú ya has bebido de ese cáliz. Lo que era solo una chispa ha comenzado a arder. No tienes a dónde ir, ni a quién recurrir , se lo que todos piensan que hiciste.— agregó cínicamente con burla en su voz.

A pesar de sus palabras, siento dentro el fuego de la determinación comenzar a arder. Tengo un propósito: no solo deshacerme de ese mal , sinó también encontrar la verdad que liberará mi nombre.

—No me dejaré llevar por tus mentiras. Debo enfrentar mi pasado, no huir —declaré con una  firmeza que me sorprendió incluso a mi .

Sin embargo, se que la batalla no ha hecho más que comenzar. El camino hacia la redención y la libertad será arduo, pero estoy decidida a luchar, no solo por mi, sino por la joven cuya memoria me persigue. Y así, con cada paso que doy , repito mi mantra en voz baja: no dejarás que la culpa devore mi alma. En cambio, perseguiré la verdad, y eso me dará la fuerza necesaria para enfrentarlo todo, incluso a la sombra que intenta corromperme .

—No puedes escapar de mí, princesa. —dice la sombra, su voz un susurro que parece penetrar hasta mis huesos— Soy un cazador y a ti te adjudicaron como mi presa.