Salida de la ciudad

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Ya pasaron casi diez meses desde mi nacimiento y me he acostumbrado a mi nueva vida.

El día de hoy mi madre y yo saldremos de la ciudad, iremos acompañadas de varios sirvientes y guardias, entre ellos esta Merazophis, para estar más seguras.

Mi padre no irá ya que según el tiene demasiado trabajo.

Vamos a ir a visitar a la familia de mi madre que vive en otra ciudad y nos quedaremos ahí por una noche.

-¿Ya está todo listo para el viaje?- le preguntó mi madre a Merazophis.

-Si, el carruaje ya está listo para salir.

-¿Segura que no quieres llevar más guardias?- pregunto mi padre a mi madre.

-Tranquilo cariño, no creo que pase nada malo, el camino es muy tranquilo y casi nunca ha habido ladrones por ahí.

-Esta bien, que tengas un buen viaje mi vida.

-Nos vemos, Sophia despidete de tu padre- mi padre me cargo y me dio un abrazo.

El camino fue muy tranquilo tal y como había dicho mi madre y el paisaje era hermoso.

En mi anterior vida en Japón vivía en la ciudad así que no podía ver tanta vegetación a menos que fuera al parque pero como casi nunca salía de casa era muy pocas las veces que iba.

Pero ahora es diferente, por la ventana puedo ver un bosque inmenso con muchos árboles y flores.

Cuando llegamos a un campo de flores mi madre pidió que pararan el carruaje y salimos a ver el campo.

Nunca antes había visto algo tan hermoso como esto.

Mi madre me llevo al campo y me bajo en el césped, yo comencé a gatear por el campo y tomaba las flores que me parecían más bonitas.

-Pero que flores más preciosas agarraste Sophia- me hablo mi madre -hay que llevarnos algunas más para poder hacer un ramo.

Con eso dicho mi madre también agarro flores pero a diferencia de mi también tomó algunas que no eran tan bonitas como las demás.

Ella comenzó a hacer el ramo y lo hizo muy bien las flores que pensé que no eran bonitas ayudaron a que destacarán más a las que si lo eran y a que se viera mucho mejor el ramo a que si le dejabamos solo las que yo había escogido.

-Mira Sophia, ¿no crees que es un ramo precioso?- mi madre me pregunto así que inconscientemente asenti con la cabeza -¿Y tu que opinas Merazophis?

Merazophis había estado con nosotras todo este tiempo pero no había dicho nada hasta ahora.

-Creo que se ve hermosa, cof cof, quiero decir hermoso el ramo se ve hermoso seguramente le encantará a sus padres mi señora.

Desde hace un tiempo había notado un comportamiento extraño de Merazophis hacia mi madre y al poco tiempo pude entender el motivo.

Y es que Merazophis esta enamorado de mi madre.

Si una persona como yo que nunca a tenido experiencia en el amor pudo notar el enamoramiento de Merazophis hacia mi madre quiere decir que el realmente no es muy bueno disimulandolo, un ejemplo es el que acabo de ver.

Pero no culpó a Merazophis por sus sentimientos hacia mi madre y de cierto modo lo entiendo.

Mi madre es muy hermosa y amable tanto que todos en la ciudad la quieren así que era de esperarse que también muchos estuvieran enamorados de ella.

-Toma tambien hice unas coronas de flores- mi madre nos dio a Merazophis y a mi las coronas y nos las puso en la cabeza.

Después de eso seguimos con nuestro camino y luego de unas horas llegamos a una mansión.

-Bienvenida señorita Seras- saludo un mayordomo que ya se veía viejo.

-Hola Alfred, ha pasado mucho desde la última vez que lo vi, ¿como has estado?

-Muy bien señorita Serás, gracias por preguntar.

-¿Donde están mis padres?

-Los señores la están esperando en el comedor.

Mi madre y yo nos dirigimos al comedor, en el camino pude notar a varios sirvientes que se nos quedaban viendo pero eso ya es normal para mi.

-Seras, cuanto tiempo sin vernos- un señor mayor se acercó a mi madre y a mi muy alegre.

-Vaya pero que niña más hermosa- también se acercó una señora mayor.

-Que bueno verlos también Madre, Padre, les presentó a Sophia mi pequeña hija.

-Que encantadora, seguramente se convertirá en una señorita tan hermosa como tu- dijo el padre de mi madre mientras me cargaba.

-Por cierto, tomen, en el camino nos detuvimos en un campo de flores así que les hice un ramo, Sophia me ayudó a escoger algunas flores- mi madre le entregó a sus padres el ramo que habíamos hecho en el camino y ellos le pidieron a una sirvienta que lo pusiera en un florero y lo trajera para ponerlo en la mesa del comedor.

Mi madre hablo con sus padres o más bien mis abuelos por un rato y después todos nos sentamos a comer.

La comida se veía muy deliciosa digna de unos nobles pero como soy una niña solo se me permitió comer puré de fruta.

Después de la comida mi madre y mis abuelos charlaron y después mi madre, mi abuela y yo salimos a dar un paseo por los jardines.

Luego del paseo volvimos a entrar a la mansión y mi madre me dejó en la habitación para que durmiera un rato antes de la cena.

Cuando desperte ya era de noche y mi madre me llevo de nuevo al comedor.

Mientras comíamos mi madre y mis abuelos conversaban.

-Solo faltan dos meses para que Sophia cumpla un año, ¿que les parece si organizamos una fiesta para celebrarlo?- digo mi abuelo.

-Me parece una idea maravillosa, aunque todavía no podemos invitar a más personas podemos hacer una pequeña fiesta entre nosotros- contesto mi abuela.

-Me parece bien, apenas regrese al condado empezaré con los preparativos para la fiesta.

-Ya quiero ver como será su fiesta de presentación ante la sociedad.

-Todavía falta mucho para eso pero te aseguró que será la fiesta más inolvidable de todas.

-Yo me encargaré de que así sea.

-Y yo me encargaré de que ningún jovencito quiera acercarse demasiado a Sophia- bromeó mi abuelo.

-Entonces yo me encargaré de encontrarme en mejor prometido para que no tenga que preocuparse por el futuro.

Mis abuelos siguieron hablando sobre mi futuro y de como les haría felices poder consentir a su querida nieta.

Después de la cena mi madre y yo fuimos a la habitacion y nos preparamos para dormir.

Esta familia es muy agradable, sigo extrañando a mi familia de mi vida pasada pero realmente estoy feliz de tenerlos.

Espero que todo siga así.

Reflejos Del Día A DíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora