¡Odio Ser 𝘖𝘮𝘦𝘨𝘢! ★Hyunho★

Capítulo 27

Narra Hyunjin.

Cinco años atrás...

Nunca había dejado de bailar, aprovechaba la soledad de mi cuarto para movermne al ritmo de la música.

Era el único momento donde me sentia completo, lleno, hasta que sucedió:

—¿Qué mierda haces?— No había notado la presencia de mi padre, pensé que estaría durmiendo como todas las tardes acompañado de sus queridas botellas de cerveza.

—N-nada.— Respondí dando pasos hacia atrás.

Él endureció su mirada y sentí a mi alfa volverse chiquito, en seguida le dió un manotazo a la radio dejando que se haga pedazos en el piso.

Intenté cubrir el traje que tenía puesto, lo
habia confeccionado para entrar al equipo
de baile, pero ya era muy tarde, mi padre
me tomó de la muñeca.

—¿Qué clase de alfa eres? ¿Un maricon?— Escupió él.

Empezé a llorar mientras él me arrastraba en dirección del patio. Quise patalear, salir de su agarre, pero era demasiado pequeño comparado con él. Allí tomó sus esposas de cuando era policía, antes de perder su trabajo, envolvió mi muñeca y luego un poste con estás.

Sin más, se fue dejándome sólo a pesar de que me esforzaba por quitármelas era imposible.

No tenía escapatoria, quedaría allí horas, tal vez días, bajo el sol y la lluvia esperando que mi mamá llegue.

Me dolía admitir que no era la primera vez que sucedía.

•°~☆~°•

Soy un idiota.

Soy un verdadero idiota.

Paso la puerta de mi casa hecho una furia ni siquiera me digno a cerrarla. Me siento tan molesto, con ganas de darme unos golpes contra la pared.

Resoplo, un torbellino de emociones dando vueltas en mi pecho y causando que unas lágrimas se asomen en mis ojos sin poder controlarlas.

Sentía algo romperse dentro de mí sin hallar forma de recomponerme, recordaba las palabras de Minho una y otra vez, la imágen de su rostro dolido torturándome.

No quería hacerle daño.

Entonces, ¿por qué lo hice? Yo jamás actuo de esa forma, jamás utilizo a alguien para buscar mi propio beneficio.

Sólo hay una opción.

Minho me gusta.

Minho me gusta mucho y la única jodida forma que hallé para acercarme era engañándome a mí mismo, diciéndome que sólo lo hacía para joder a Jisung.

Vaya que me había equivocado y ahora era muy tarde para dar marcha atrás.

Lo había perdido, había jodido mi oportunidad de estar junto al único omega que causaba locuras en mi estómago y un sube y baja de emociones en mí.

Que me hacía sentir el significado de euforia.

Entré a mi habitación con expresión decaída, ni siquiera pude mostrar asombro al percatarme de que Yongbok estaba acostado en mi cama jugando con mi laptop.

—Uy, ¿y esa cara espanta muertos?— Sonrío burlón.

—No estoy de ánimos, ¿cómo entraste?

—Tú madre me cerró la puerta en la cara así que entré por la ventana.— Señaló la misma.