Jimin le dio un sorbo al té siendo embargado por esa sensación cálida que se guardó en su pecho. Suspiró profundo del puro gusto y abrió los ojos con lentitud tomando una mini tarta de fresa. Su obsesión por la comida humana es grande y casi se muere del gusto al sentir el sabor dulce de la jalea explotar en su lengua.
Se cubrió la boca con una mano mientras observa el jardín, a veces le gusta tomar el té aquí y oler el agradable aroma de las plantas.
Yoongi le a colocado un cielo artificial con sus poderes, así que ahora hay un cielo azul con nubes preciosas y por eso decidió salir a beber el té.-Es agradable- Susurró para si mismo mientras tira de su gabardina negra, de forma inusual Yoongi apareció en medio de las flores vistiendo un pantalón negro ajustado junto a una camisa de botones y una gabardina de color vino con el cabello suelto.
-Que alivio. Te estaba buscando- El peliblanco caminó más rápido al escuchar la voz delicada del pelinegro y cuando estuvo frente suyo le tomó la mano dándole un beso en el dorso.
-Aquí estoy. ¿Me necesitas?- Jimin se colocó de pie dejando la taza de té a un lado.
-Vamos de cacería. Debo encargarme de algunas criaturas- Le tomó un mechón de cabello dándole una suave sonrisa. Los dos caminaron en medio del jardín agarrados de la mano.
-¿Y que son esas criaturas?- El pelinegro levantó la mirada encontrándose con aquel rostro masculino y ojos felinos.
-Mi mascota... Cerbero, el perro de tres cabezas que cuida mi mansión. Como estuve sellado por tanto tiempo escuché que una criatura lo llevó algo lejos. Es un dragon de cinco cabezas pero no te preocupes . Es fácil de matar... Lo es para nosotros-
Cuando llegaron al final del jardín agitó sus grandes alas cubiertas por plumas negras dejando fascinado al peliblanco.
-Oh, que lindas- Parecía que tenían algún tipo de brillantina por que poseen un brillo tan especial. Es tan hermoso como su dueño.
-También tienes alas- Le comentó con una sonrisa tocándole la espalda con cariño.
-¿Cómo puedo sacarlas? No se como usar este nuevo poder- Es cierto, el peliblanco ahora tiene mucho por aprender. El poder demoníaco es muy distinto a otros poderes.
-Solo imagínate con las alas. Cuando quieres hacer algo con tus poderes debes desearlo, manifestar y van a salir-
-Mmmhhh... Sí- Se quedó de pie y cerró los ojos buscando esa manifestación. Lo primero que pasó por su cabeza fue: "Quiero unas alas lindas como las de Lucifer". Lo repitió unas tres veces hasta que escuchó un aplauso.
-¡Mira tus alas! Son tan hermosas- Abrió los ojos de inmediato al escuchar la voz emocionada del pelinegro.
Sus alas son tan grandes que la punta cae en el piso y son del mismo tono que su cabello. Un hermoso blanco. Comparadas a las de Jimin las suyas caen para los lados como una manta mientras que las de Lucifer son firmes y más pequeñas.-Ahora para volar solo tienes que agitar con algo de fuerza tus omoplatos. Ellas te van a elevar por si solas y te darán el equilibrio, solo déjalo fluir sin prisas- Yoongi siguió las instrucciones. Él había volado antes pero no tenía unas alas como guía, estás le dan un peso extra a su espalda y cuando se elevó Jimin le tomó la mano.
-Bien... Podemos ir despacio- Le sonrió entrelazando sus dedos. El aleteo de Yoongi es cuidadoso y lento, van un poco cerca del piso pero el pelinegro le ayudó a tener un poco más de altura para observar el infierno.
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The fate of the Golden Kitsune ~ YoonMin.
FanfictionYo, acabo de despertar de un sueño. Pero tú y yo tuvimos que decir adiós y yo no sé lo que todo eso significa. Si la fiеsta se terminara y nuestro tiеmpo en la tierra se acabara, quisiera abrazarte solo por un momento y morir con una sonrisa. Si el...