Capítulo 15

223 42 2
                                    

                                                       

Liam suelta una risa por la nariz y sonríe, mostrando su hoyuelo.

—Y ahora te está viendo con coraje. Dime, ¿es divertido molestar al jinete más poderoso de todo el cuadrante?

—Podrías intentarlo y averiguarlo tú mismo —sugiero, abriendo mi cuaderno en la siguiente página vacía. No puedo girarme. No lo haré.

Desde la noche que tuvimos sexo no hemos hablado,me desperté en la mañana y ya no estaba en la habitación y ni siquiera tuvo la descendencia de preguntarme cómo amanecí cuando me vio ese mismo día .

Se que no debería estar celosa al fin y al cabo yo no siquiera debería estar aquí ,su destino es estar con Violet no conmigo,pero no puedo evitar enfurecer ante ese pensamiento,me enferma .

Desear a Xaden está bien. Tiene que estar bien. Pero ¿ceder a los impulsos que despierta en mí? Eso sería una idiotez.

—No, gracias, paso.

Pierdo la batalla con mi autocontrol y miro sobre mi hombro. Como era de esperarse, Xaden está sentado en la fila de hasta arriba junto a Garrick, perfeccionando el arte de poner cara de aburrimiento. Saluda a Liam con un movimiento de cabeza y Liam le devuelve el gesto.

Yo solo pongo los ojos en blanco y vuelvo a mirar hacia el frente.
Liam se concentra en su figurita, que se parece mucho a su Rojo Cola de Daga, Deigh.

—De verdad parece que intentaran asesinarme durante todas las clases por cómo hace que me sigas siempre. —Niego con la cabeza.

—En su defensa, sí está de moda querer matarte. —Rhiannon acomoda sus cosas.
—¡Una vez! ¡Ha pasado una vez, Rhi! —Me reacomodo para evitar cargarles peso a mis costillas lastimadas. Están bien vendadas, pero recargarme en el respaldo de mi asiento no es opción.

—Solo son amenazas. La única vez que en realidad me atacaron directamente fue de noche, y no es como que Liam duerma en mi habitación.

—Pues yo no me opongo a… —comienza a decir, deteniendo su cuchillo sobre el pedazo de madera.

—Ni empieces. —Giro la cabeza para verlo y no puedo evitar reírme—Eres un donjuán desvergonzado .

—Gracias. —Sonríe y vuelve a su figurita.
—No lo dije como halago.

—No le hagas caso a Violet, es solo que tiene mucha frustración sexual, y eso pone de malas a una chica. —Rhiannon anota la fecha en su página en blanco y yo hago lo mismo, mojo la pluma en mi tintero portátil. Esas plumas sencillas que no causan desastres y que otros ya pueden usar son solo una de las razones por las que me urge
canalizar. Adiós a las plumas que dependen de un botecito de tinta.

—Eso no tiene nada que ver. —Dioses, ¿no lo pudo decir un poco más fuerte?

—Pero igual no lo estás negando —dice Rhiannon, y me sonríe con dulzura.

—Vale no lo niego ,si estoy frustrada sexualmente —digo bajito —Pero eso no viene al caso —digo un poquito más alto

Un par de horas después me cepillo el cabello en la privacidad de mi habitación, aún totalmente vestida, con todo y botas y armadura. Aún no puedo creer que haya hecho el ridículo frente a todo mi pelotón solo porque Xaden decidió entrenar sin camisa.

Necesito un acostón. Si es con Xaden mejor 

Noo ,que carajos no pienses eso maldita sea Elara estás loca

Me detengo a media cepillada cuando una descarga de energía me corre por la espalda y se disipa en un instante.

Eso estuvo… raro.

Oh mierda creo que voy a canalizar,si carajo si por fin

Otra oleada me recorre, esta vez más fuerte, y suelto el cepillo, aferrándome a la orilla del tocador para no caerme cuando mis rodillas amenazan con doblarse. Esta vez la energía no se disipa; se queda, vibrando bajo mi piel, zumbando en mis oídos y abrumando todos mis sentidos.

Algo dentro de mí se expande, demasiado grande para mi cuerpo, demasiado vasto para ser contenido, y siento el dolor en cada nervio mientras me abro entre crujidos, con el sonido como huesos al romperse reverberando en mi cráneo. Es como si se estuvieran rompiendo todas las costuras de mi ser.

Mis rodillas azotan contra el piso y me llevo las manos a la cien, intentando meter todo lo que soy de vuelta en mi cabeza, obligándome a encogerme.
La energía entra a raudales, como una avalancha de poder puro e infinito, destruyendo todo lo que era y creando algo completamente nuevo mientras llena cada poro, cada órgano, cada hueso. Me duele la cabeza y siento como si Tairn hubiera volado demasiado alto, demasiado rápido y no pudiera destaparme los oídos. Lo único que puedo hacer es quedarme tirada en el piso y rezar para que la presión se equilibre.
Miro mi cepillo, con la mejilla aplastada contra el suelo de madera, y respiro.
Inhalo y exhalo.

Inhalo… y exhalo… entregándome al violento ataque.

Ohh si perra mi momento está por comenzar

  Las Alas Del Destino|Fourth Wing|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora