Capitulo 3

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El eco de mis pasos resonaba en el largo pasillo mientras avanzaba hacia la oficina de la directora Im. Sabía que la directora era una de las figuras más poderosas y respetadas de la Academia de Magia de Seúl, y siempre le había resultado intimidante. Sin embargo, a diferencia de otros profesores, Yoona era la única que conocía la verdad: mi linaje, el prestigioso apellido Lee, que había decidido ocultar para que mis errores no llegaran a los oídos de mi familia. Hasta ahora, ella había evitado que cualquier incidente llegara a mis padres, resolviendo todo por mis propios medios. Pero esta vez... esta vez no estaba seguro de qué haría.

Cada paso parecía alargar el pasillo, como si se acercara a una sentencia inevitable. ¿Qué iba a decirme la señorita Yoona sobre el vínculo con Jaehyun? Era algo grave, y lo sabía. Aunque confiaba en que ella no lo juzgaría del todo, pues había sido amiga cercana de mis padres durante años y siempre había mostrado comprensión, tampoco podía seguir tapando mis problemas mágicos para siempre.

Suspiré profundamente antes de tocar la puerta, sintiendo cómo el nerviosismo .e crecía en el pecho. Desde el otro lado, la voz autoritaria de Yoona me invitó a pasar.

-Adelante, Taeyong.

Entró con cautela. La directora estaba de pie junto a la ventana, mirando el vasto campus bañado en luz natural. Vestía su túnica mágica negra, que le daba un aire de autoridad, aunque su rostro, severo, también reflejaba una preocupación maternal.

-Taeyong, me alegra que hayas venido tan rápido -dijo sin volverse al principio, con un tono firme y a la vez cálido-. Siéntate, por favor.

Se sentó frente al gran escritorio de madera, tratando de encontrar algo en la habitación que distrajera su mente de la conversación que sabía que estaba por venir. La atmósfera pesada de la oficina no dejaba espacio para evadir.

Finalmente, Yoona se giró para mirarlo, y aunque él intentó mostrarse firme, sus nervios lo traicionaron. Era una mujer que imponía respeto, no solo por su magia, sino por su presencia. Taeyong sabía que ella lo apreciaba, pero también que no tomaría el incidente a la ligera.

-Supongo que sabes por qué te he llamado -dijo, cruzando las manos frente a ella-. Lo que sucedió en la clase de pociones no es algo que podamos pasar por alto, y lo sabes bien.

-Sí, directora Yoona... lo sé -respondió, bajando la mirada hacia sus manos, que jugueteaban nerviosamente con el borde de su suéter.

-Un hechizo de vinculación mágica no es algo que ocurra por accidente todos los días, y mucho menos en las circunstancias en las que te encontrabas -hizo una pausa, dándole tiempo para asimilar lo que decía-. ¿Qué fue exactamente lo que ocurrió?

Tomó aire y trató de explicarlo lo mejor que pudo, aunque en el fondo él mismo no comprendía del todo lo que había sucedido.

-Estaba preparando la poción de invisibilidad, siguiendo cada paso, pero algo salió mal al final... y Jaehyun entró justo cuando la explosión ocurrió. El hechizo de vinculación simplemente apareció... no sé cómo ni por qué. Todo pasó tan rápido...

Yoona asintió lentamente, escuchando cada palabra. Luego caminó hacia su escritorio y se apoyó en él, mirándolo con una mezcla de comprensión y preocupación.

-Sé que no fue intencional, Taeyong. Pero esto es algo grave. La vinculación mágica no es algo que se deshace fácilmente. Estamos hablando de una conexión entre dos personas. Y ahora, tanto tú como Jaehyun están unidos, aunque ninguno de los dos lo desee.

Un nudo se formó en su garganta. Sabía que lo que Yoona decía era cierto, pero oírlo en voz alta hacía que la realidad fuera más difícil de asimilar.

Entre Hechizos y Fermonas | JAEYONGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora