Dulce obsesión

💍 Capítulo 14. Consolidación 💍

Yoongi.

—No seas desesperado, por favor. Ya casi llegamos.

Tomo aire con fuerza al tiempo que Aria me guía de la mano hacia mi supuesta sorpresa.

Nos escapamos a Jeju este fin de semana aprovechando que mi agenda estaba desahogada. Lo necesitábamos considerando la carga de trabajo y el incidente en la feria de las culturas. Llegamos a noche y esta mañana mi mujer me confesó que tenía una sorpresa para mí. Ya no me molesta, después de todo, ella siempre es la excepción.

—¿Listo?

—Desde hace mucho, cariño. —Intento no sonar aburrido—. Vamos, date prisa.

—Oh, espera solo un minuto más.

Escucho sus pasos presurosos sobe la arena de un lado a otro y se me escapa una media sonrisa. Al fin me quita la venda de los ojos y permanezco perplejo unos segundos antes de reaccionar.

—Podemos usarlas durante una hora. Es totalmente seguro y... —Se queda callada ante mi evidente desconcierto—. ¿No te... gusta?

—Rentaste cuatrimotos.

Abraza su cintura y desliza su pie sobre la arena antes de responder.

—Eh, sí. Me contaste lo mucho que te gustaban las motos y... bueno, yo pensé que...

El niño de dieciséis que llevo dentro se deshace de felicidad. El Yoongi de treinta y dos apenas consigue conmoverse. Después de mi accidente en moto mi padre me prohibió determinantemente volver a usar una. Reprimí durante años el deseo de hacerlo porque además, terminé con un ligero trauma que incluso no me permitía conciliar el sueño.

—Dicen que la manera más fácil de superar un trauma es enfrentándolo. —Su rostro se entristece—. Pero... dios, es una idea horrible. Lo siento, Yoongi. —Se avergüenza.

—Quiero hacerlo. —La poca emoción en el tono de mi voz no tiene nada de ver con la emotividad que se está desatando en mi interior.

—No quiero que lo hagas solo por no hacerme sentir mal. En serio, si no quieres podemos hacer otr...