Mi casa es enorme, mi mente intensa.
Mis dedos son cortos, mi pelo es largo.
Te miro a los ojos, no se lo que escondes,
te toco el alma y tu corazón no me contesta,
te beso la frente y tu paz se inquieta.
Visitas mi cocina y te marchas asqueada,
te muestro mis discos y los estrellas contra
mi gran pared. No se que hacer, ya no se.
Te regalo mis besos en frascos de oro,
los esparces como si fueran polvo
para que las hormigas los devoren.
Te muestro el ático y gritas enfurecida,
te muestro fotos antiguas y te quedas llorando.
Te doy mi anuario y destruyes las hojas,
te regalo mi tiempo y solo te vas.
Tomo tu mano, es pálida y fría,
las mías calientes y tiernas,
tus ojos están llenos de ira,
mis ojos llenos de amor.Conoces la puerta principal, la atraviesas y
con tu huida te llevas mi calma, te llevas mi paz;
grito enloquecido, te giras y me miras, me muestras
tu dedo y corres deprisa hacia el valle.Solo pude retroceder,
ir al sótano y sentarme.Hubiese querido correr hacia ti
pero mis piernas se durmieron...
Corre, tanto como puedas,
mis palabras te van alcanzar,
mi voz hará eco en tu eternidad.