¡Oh, querida!

7 1 0
                                    

He construido una casa,
una casa para ti.

Tiene grandes ventanas, dan paso a la luz,
tiene una gran sala, para tu sofá marrón.
La cocina es inmensa, también tiene un gran patio,
pero sobre todo, tiene un frío sótano.

Allí puedes torturarte a ti misma una y otra vez,
es oscuro, como tú.

Tiene una silla justo en el centro,
puedes sentarte y pensar en ti.
Tal vez la oscuridad solo te consuma
y así asumas que estás demente.

Creo que es imposible vencerte
no puedo contigo y tus gritos,
no soporto tus susurros nocturnos
y tus llantos matutinos.

La soledad me dijo todo esto, dijo que no estoy bien,
que no la puedo disfrutar, que estoy mal de la cabeza,
que necesito otro aire, algún otro lugar para ser normal.

Prefiero sentarme en mi sofá, verme morir, verme llorar.
Prefiero sentarme en mi silla o dejarla caer,
prefiero pensar en torturarme, no en verme ser;
Me gusta morir cada noche en esta hermosa casa,
tanto espacio favorece mi mente, favorece mis ideas,
llena en su totalidad el vacío de mi corazón.

La soledad dijo que morir no era opción,
yo ofrezco las opciones... Oh querida mía,
elijo si estar o no.

Un Mundo Sin EsquinasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora