Capítulo 10: Los últimos días (Cynthia, Grace, Lenora, Domino y Lorelei)
Ash se sintió un poco nervioso por quién era su cita. Se enteró de quién era su cita y esperaba no decepcionarla. Vestido con su esmoquin, recibió su regalo y bajó las escaleras.
"Oh, Ash, te ves muy guapo", dijo su madre.
"Gracias mamá."
"Diviértete hijo, pero no demasiado."
-No te preocupes papá, no lo haré.
Luego se fue y se subió a un auto que le había prestado Lorelei. Una vez dentro, emprendió su viaje de diez millas y comenzó a pensar si debía planificar lo que iba a hacer o simplemente improvisar.
Cuando se acercó al lugar, después de conducir un poco, vio que era un hotel grande. Bueno, uno de los más lujosos, si es que había visto alguno. Delante estaba la mujer con la que iba a salir. Ella lo vio con un elegante vestido negro.
Él sonrió y fue a saludarla.
"Hola Cynthia."
"Oh... tú debes ser Ash. Me sorprende lo guapo que eres".
Se sonrojó un poco. "Gracias. Oh, aquí hay algo para ti".
Sacó un pequeño regalo. Ella lo vio y sonrió. "Ah, ¿una gargantilla para mí? Gracias".
Se lo puso y luego se subió al auto. Una vez que Ash entró también, se dirigió al lugar del baile de graduación.
"Entonces, ¿cómo estuvo tu día?"
"Fue muy largo. Tuve que pedir ayuda con la ropa, peinarme y tratar de que fuera aún más especial para nosotros".
Él sonrió suavemente "Gracias por hacer esto".
"No hay problema, Ash. Domino me contó todo sobre ti y espero que estés a la altura de las expectativas".
Él dio su propia sonrisa maliciosa: "Yo soy el bombo publicitario".
El coche se detuvo en un semáforo en rojo y se quedó mirando fijamente. Durante unos segundos, ambos se rieron.
"Está bien, lo admito, eso sonó cursi".
-Sí, pero valió la pena.
Las luces cambiaron y él continuó conduciendo.
Finalmente llegaron al lugar y él encontró un lugar para estacionar. Él y su cita salieron del auto y se tomaron de la mano. Una vez que llegaron a la entrada, le mostró los boletos al acomodador. El acomodador en cuestión se sorprendió al ver quién estaba al lado de Ash y simplemente los aceptó y los dejó entrar.
"¡¿Cómo diablos la consiguió Ash?!"
Una vez dentro, ambos quedaron impresionados con los detalles del lugar.
"El tema es el océano. Debería haber elegido un poco de azul".
-No, todavía te ves genial, Cynthia.
Ella sonrió suavemente mientras él la guiaba hacia una mesa. Se sentaron mientras algunos los miraban.
¿Por qué tengo la sensación de que nos están mirando?
Ash negó con la cabeza. "Supongo que están tratando de entender cómo te tengo como mi cita".
"Tch. Eso es estúpido, deberían centrarse en sus citas más que en nosotras". Suspiró. "Supongo que no ayuda que sea tan conocida".
"Es cierto, pero no nos dejemos intimidar. Disfrutemos la noche y después exploraremos más."
Ella se rió.