Un Hombre Una Misión || Classroom of the elite [Traducido]

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Temporada 1: Capítulo 8

Era el segundo día de clases y Ayanokouji notó algunas cosas extrañas y peculiares en esta institución. Aparte de su profesor de aula Chabashira-sensei y el profesor de matemáticas Sakagami-sensei, la mayoría de los demás profesores eran muy amables.

En su sincera opinión, incluidos los poco amigables, todos los profesores eran demasiado apáticos. La mayoría de la clase hacía sus propias cosas y ninguno de los profesores les dio advertencias ni castigos. Aunque el propio Ayanokouji no había asistido a ninguna escuela antes de esto, según el conocimiento común y su experiencia en la Sala Blanca, esto nunca debería ser la norma.

"La escuela realmente los está provocando con fuerza, ¿eh? ¿Debería mostrarle un signo de paz a la cámara de CCTV? Tal vez más adelante".

Personas como Ike y Hondou estaban jugando con su Nintendo Switch en medio de sus clases. Sotomura, a quien todos llamaban "Profesor", estaba leyendo algo en su teléfono mientras adoptaba poses extrañas y tarareaba para sí mismo.

El chico pelirrojo con aspecto de delincuente, cuyo nombre Ayanokouji aún desconoce, estaba roncando en medio de la clase. Su baba estaba por todo el escritorio. Era una imagen bastante repugnante.

Yamauchi, el payaso que fue responsable de que toda la clase aceptara la apuesta de Ayanokouji (por lo que el chico de cabello castaño estaba muy agradecido), adoptó una actitud bastante atrevida. Estaba leyendo algunas imágenes en blanco y negro en una enorme tableta mientras, por alguna razón, su mano izquierda se frotaba la zona de la entrepierna.

De cualquier manera, Ayanokouji encontró su acto increíblemente repugnante y apartó la mirada de la escena. Luego, sus ojos se centraron en las chicas. La mayoría de ellas usaban sus teléfonos móviles y conversaban en voz alta entre sí, mientras que algunas de ellas le lanzaban miradas de disgusto al chico de cabello castaño mientras hablaban entre ellas en susurros.

Su acto no pasó desapercibido para Ayanokouji mientras suspiraba para sí mismo.

"Me encantaría ver cómo se sentirían cuando las otras clases también les dirigieran esa mirada mientras cotilleaban sobre ellos. Sería una ironía en sí misma".

"Esto es irritante, si soy sincera".

Miró hacia su compañera de asiento, que se agarraba las sienes mientras observaba a todos los demás estudiantes.

"No te preocupes por eso Horikita. Déjalos disfrutar este mes tanto como quieran. Luego los haré trabajar como el demonio".

Ella le dirigió una mirada divertida mientras hacía girar el bolígrafo entre sus dedos.

—Tal vez no deberías decir esas cosas en voz alta, Ayanokouji-kun. Tu reputación entre ellos se reduciría aún más.

La mirada de Kiyotaka se concentró en Horikita. Había vuelto a ser la misma de siempre... Su personalidad fuerte y fría como el hielo. Era como si la situación en la tienda de conveniencia ni siquiera hubiera ocurrido.

"Eso no es un problema. Pueden desagradarme tanto como quieran. Eso haría que la situación fuera aún más satisfactoria cuando finalmente se revelara".

"Ayanokouji-kun, ¿eres un sádico?"

—Definitivamente no. ¿No te lo dije? Soy un ser humano normal con algunas habilidades de deducción.

Horikita suspiró para sí misma antes de dar una pequeña sonrisa de derrota.

"Como si fuera a creer eso."