𝐓𝐡𝐞 𝐥𝐨𝐨𝐤 𝐨𝐟 𝐥𝐨𝐯𝐞 - Lyle Menéndez. ⁺¹⁸

- 𝙿𝚛𝚘𝚋𝚕𝚎𝚖𝚊𝚜

Tenía tiempo sin hablar con Jamie, la última vez que hablamos fue cuando le conté sobre Lyle.
Decidí llamarla, duro en contestar pero respondió.

—¡Jamie! ¡Te extrañe!— hablé entusiasmada.

—Oh, hola Jennifer.— respondió seca.

—¿Pasa algo? ¿Que tienes?— respondí preocupada.

—No pasa nada, dime ¿Sigues saliendo con Lyle?— preguntó.

—¡Si! Todo va marchando bien, ¿por que la pregunta?— respondi entusiasmada pero algo extrañada

—Ah... no, por nada.— respondió con un cambio de tono de voz. —Hablamos después, Jennifer.—

Colgó.

Se me hizo extraño, pero no hice nada más; quizá la estaba pasando mal y ocupaba tiempo a solas.

• • •

Eran las 2:00 a.m., me había desvelado haciendo tareas, cuando porfin estaba cerrando los ojos para poder dormir recibí una llamada.

Era un número desconocido, sin embargo acepte la llamada.

—¿Hola? ¿Quien es?—

—Jennifer!, soy Erick, Erick Menéndez.—

—Ah, hola Erick, ¿qué ocurre? Es de madrugada.—

—Siento molestar Jen, solo... quiero alguien con quien hablar, lyle esta dormido, ¿recuerdas lo qué pasó ayer? Le conté a mi psicólogo lo que hicimos yo y Lyle y sin embargo seguí igual, he estado... teniendo pensamientos suicidas y quería ver si podría ir a tu casa, yo... siento molestar Jen—

—No pasa nada Erick, claro, puedes venir, Sabes donde es ¿no?—

—Si claro, Lyle me había dicho.., bien, voy en camino.—

No esperaba recibir esa llamada, sin embargo sabía que Erick realmente la estaba pasando mal.

Pasaron al rededor de 20 min y escuché el timbre, era Erick.

Abrí la puerta y lo noté con los ojos inchados, a pesar de que nunca hemos tenido una larga conversación, me sentía mal por verlo así.

—¡Hola Erick! Adelante, pasa.—

Erick asintió con sollozos y subimos a mi habitación.

Me senté en la cama y le hice una seña palmando la sábana para que él también se sentara, y ahí empezó a contarme todo lo sucedido.

—Créeme que me dolió hacerlo, Jen. Me siento muy mal, todos los días sueño lo mismo, yo... tirándome un balazo en la cabeza con una escopeta, me atormenta todos los días el mismo sueño y este sentimiento tan extraño, no puedo dormir aveces... estoy cansado Jen.— Dijo Erick con las manos en su cara para ocultar las lágrimas.

Lo abrace por un costado diciéndole algunas palabras esperando a que se sintiese mejor.

Erick sonrió tiernamente al escuchar mis palabras y nos dimos un pequeño leve abrazo.

—Gracias Jen, necesitaba escucharlo... de verdad, gracias por escucharme.— respondió Erick un poco más tranquilo.

—No agradezcas Erick, aunque no hayamos tenido antes una conversación larga, estaré para ti, para ti y para tu hermano, ambos tienen mi apoyo.— respondí dándole una pequeña sonrisa.

Me devolvió la sonrisa, y se quedó un rato más, empezamos a platicar sobre el, sobre yo y Lyle, lo mucho que lo quería, me contó que quería ser modelo, me contó aventuras de él y Lyle, etc, él era una persona bastante tierna y agradable.