Narrador.
Lyle se sentó en el rincón de la sala común de la cárcel, intentando releer una carta de apoyo que había recibido. Pero el bullicio a su alrededor hacía imposible concentrarse. Un grupo de internos en la esquina murmuraba algo, y de vez en cuando, sus risas rompían el silencio.
Uno de ellos,se acercó con una sonrisa burlona.
—Oye, Menéndez, ¿así que tu novia viene todo el tiempo?—
Lyle levantó la mirada, sabiendo que no saldría nada bueno de esa conversación.
—¿Que te importa?—
—Oh, nada... —dijo el hombre con fingida inocencia, pero su sonrisa se ensanchó mientras los demás internos reían.
—Solo que parece que ella y tu hermano se llevan bastante bien. Siempre los veo hablando mucho cuando están aquí.—
Lyle sintió cómo la sangre le hervía. Cerró la carta con fuerza, tratando de ignorarlos. Pero otro interno, sentado cerca, añadió combustible al fuego.
—Sí, hombre, tal vez tu novia ya te cambió por tu hermanito. Digo, Erik tiene ese aire de chico sensible, ¿sabes? A las mujeres les encanta eso.—
El grupo estalló en carcajadas, y Lyle, incapaz de contenerse, se levantó de golpe.
—¡Cállense! No tienen idea de lo que están diciendo—
La sala se quedó en silencio por un momento antes de que el hombre hablara de nuevo, con un tono burlón.
—Tranquilo, Menéndez. Solo estamos bromeando. Aunque... quién sabe. Estás aquí encerrado, y las cosas afuera cambian rápido.—
Lyle los ignoró y salió de la sala, pero sus palabras lo siguieron como un eco que no podía borrar.
Sala de visitas.
Cuando Jen entró para verlo ese día, lo encontró con una expresión dura, casi fría. Lyle estaba sentado con los brazos cruzados, su mirada clavada en la mesa.
—Hola, mi amor —dijo Jen con suavidad, tomando asiento frente a él.
Lyle apenas levantó la vista.
—Hola.—
Ella frunció el ceño.
—¿Qué pasa? Estás raro, te conozco. ¿Todo bien mi amor?—
Él la miró fijamente, y por un momento, no supo cómo abordar el tema. Pero la mezcla de celos y las palabras de los internos finalmente salieron a la luz.
—¿Qué pasa entre tú y Erik?—
Jen parpadeó, sorprendida.
—¿De qué hablas?—
—Siempre te veo con él. Cuando vienes aquí, pasas más tiempo hablando con Erik que conmigo.—
Jen abrió la boca para responder, pero Lyle continuó.
—Y no soy el único que lo nota. Incluso aquí me lo dicen. "Parece que tu novia ya te cambió por tu hermano", dicen. ¿Es eso lo que está pasando, Jen?
No me gusta que te le acerques, ni a él ni a otros hombres.— miro para al lado con una mirada de celos realmente impresionante, apretando su mandibula.
Jen lo miró incrédula
—¿Estas celoso de Erik?— frunció el ceño
Lyle apretó los puños sobre la mesa, incapaz de mirarla directamente.
—No lo sé... No lo sé, Jen. Solo sé que todo esto me está matando.—
—Para mi también es difícil Lyle, pero no me gusta el hecho de que Dudes de mi, jamás te he dado razones para hacerlo.—
Lyle finalmente la miró, sus ojos llenos de inseguridad.
—No sé si aún puedes amarme después de todo esto. Tal vez piensas que esto no vale la pena.—
—Te amo Lyle, vales la pena, todo por ti vale la pena, pero dudaste de nuevo de mi...— hizo una pausa —Olvídalo, Por hoy es suficiente, ¿okey?, lo siento.— sonrió para abajo.
Esa noche.
Lyle no pudo dormir. Las palabras de Jen resonaban en su cabeza, y el peso de su propia inseguridad lo aplastaba. Esa misma noche, escribió una carta con manos temblorosas:
"Jen, No puedo dejar de pensar en lo que pasó. Me equivoqué y no tengo excusa para lo que dije. Estoy aterrado. Nunca antes había sentido tanto miedo de perder a alguien, y el miedo me hizo reaccionar de la peor manera. Perdóname. No hay nadie más para mí que tú, y me duele haber dudado de ti. Por favor, no me dejes. Te ama: Lyle.
Posdata: te dedico "I Only Have Eyes For You" de "The flamingos" :)"
Días después.
Cuando Jen llegó nuevamente a la sala de visitas, encontró a Lyle sentado con los hombros caídos, como si el peso de sus palabras lo hubiera aplastado.
Jennifer.
Me se senté frente a él, colocando la carta sobre la mesa.
—La leí.—
Lyle levantó la mirada, sus ojos llenos de arrepentimiento.
—Sé que fui un idiota. Lo siento, Jen. Estoy... estoy asustado.—
Lo miré fijamente antes de suspirar.
—Lyle, entiendo que tengas miedo. Pero no puedes dejar que eso te haga dudar de mí. Estoy aquí porque te amo, no porque tenga que estarlo.—
Él asintió lentamente, y por primera vez en días, una pequeña sonrisa cruzó su rostro.
—Gracias por no rendirte conmigo.—
—No agradezcas, Te amo.— sonreí
Me levante para irme, pero cuando estaba a punto de dar un paso hacia la puerta, Lyle me detuvo con la mirada. Era un gesto silencioso pero cargado de emoción.
Lo entendí de inmediato y, antes de que los guardias pudieran intervenir, me incliné hacia él. Lyle se levantó ligeramente y me abrazó con fuerza, como si ese momento fuera su única conexión con el mundo exterior.
Antes de separarse, presioné un beso breve pero lleno de amor contra sus labios.
—Te amo, Lyle —murmuré
—Y yo a ti —respondió él con sinceridad, abrazándola aun con más fuerza, dándole lo que comenzó como un beso, Iba cada vez demasiado apasionado.
—Estar sin ti me vuelve loco Jen.— Dijo Lyle entre besos húmedos en mi cuello, apretándome aún más a él
Sentí su erección, el cada vez acercaba más mi cuerpo hacia el. —Espera Lyle, aquí no, lamentablemente podría aver gente vigilando.—
—Cierto, perdón no soporto estar sin ti, sin besarte—
Dijo viéndome a los ojos suplicante.
—Cuando salgas de aquí, te voy a recompensar esto.— le guiñe un ojo y le di un beso.
Jen salió de la sala, dejando atrás a un Lyle renovado. A pesar del juicio y la incertidumbre, su amor había superado otro obstáculo.
—•—
Ayy Nose pero siento q ya era hora de un momento apasionadito JAJJA 💔 ups esta muy largo este cap 😭
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𝐓𝐡𝐞 𝐥𝐨𝐨𝐤 𝐨𝐟 𝐥𝐨𝐯𝐞 - Lyle Menéndez. ⁺¹⁸
ФанфикшнJennifer Bladell se enamora de Lyle Menéndez, un sociopata, a pesar de que la gente se ponga en contra de ellos, no es impedimento para su amor. Lucharán por estar juntos, sin importar las consecuencias. - 𝘷𝘦𝘰 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘢𝘳 𝘢 𝘭𝘺𝘭𝘦 𝘤𝘰𝘯 𝘶�...
