Por Dios, Felix

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La tensión era palpable dentro de la oficina del director. Ambos, Felix y Hyunjin, estaban de pie frente al escritorio, intercambiando miradas desafiantes mientras el director les lanzaba una mirada severa.

Director: "Bueno, quiero que ambos me expliquen qué fue exactamente lo que pasó allá afuera. Este tipo de comportamiento es inaceptable en nuestro equipo."

Felix suspiró, intentando mantener la calma. "Con todo respeto, director, yo solo estaba jugando. Hyunjin fue quien perdió el control y me empujó sin razón."

Hyunjin bufó, cruzándose de brazos y lanzándole una mirada desdeñosa a Felix. "¿Perder el control? No te hagas la víctima. Tú lo buscaste con esa actitud arrogante."

Felix se giró hacia él, alzando una ceja con una sonrisa apenas disimulada. "¿Mi actitud? Perdón, ¿te molesta que haya jugado bien?"

El director suspiró, viendo cómo ambos parecían más dispuestos a pelear que a resolver las cosas. Hyunjin soltó una risa sarcástica, inclinándose un poco hacia Felix.

Hyunjin: "¿Crees que un partido cambia algo? Solo porque tuviste suerte y metiste algunos goles no significa que seas mejor."

Felix, sin dejarse intimidar, le sostuvo la mirada, con una calma desafiante. "No me importa ser mejor que tú. Con que haya jugado bien, me basta. Pero parece que eso a ti sí te molesta."

Director: "¡Basta! Esto no es una competencia para ver quién es mejor. Los dos son responsables de sus acciones, y hoy ambos demostraron una falta de respeto hacia sus compañeros y hacia el equipo."

El director los observó en silencio, evaluando cómo manejar la situación.

Director: "Quiero que entiendan algo: en este equipo, todos juegan juntos. Así que hasta que ambos puedan dejar sus diferencias de lado y trabajar como compañeros, tendrán que enfrentar las consecuencias."

Ambos jóvenes se miraron, aún con hostilidad, sabiendo que ninguno estaba dispuesto a dar el brazo a torcer. Sin embargo, las palabras del director dejaron claro que el enfrentamiento no sería la última batalla que tendrían que librar juntos.

El gimnasio estaba tranquilo durante el receso, y Felix aprovechaba el momento para seguir practicando con algunos de sus compañeros de gimnasia

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El gimnasio estaba tranquilo durante el receso, y Felix aprovechaba el momento para seguir practicando con algunos de sus compañeros de gimnasia. Enfocado en perfeccionar sus movimientos, se movía con una mezcla de elegancia y precisión, concentrado en cada detalle de su rutina.

Sin que él lo notara, en una de las esquinas del gimnasio se encontraban Hyunjin y sus amigos, incluyendo a Chan, quien había decidido quedarse para ver qué tal le iba a Felix en su entrenamiento. Discretos, observaban en silencio, cada uno con una botella de agua en mano mientras intercambiaban algunos comentarios.

Entonces, Felix se preparó para hacer una voltereta hacia atrás. Ejecutó el movimiento con total precisión, y justo al girar en el aire, su camiseta se levantó un poco, dejando ver una pequeña franja de su cintura pálida, delicada y sorprendentemente esbelta. La imagen fue tan inesperada que Chan, que estaba tomando agua en ese instante, se atragantó de la impresión, escupiendo el agua al suelo.

Chan (tosiendo, sorprendido): "¿Pero qué...?"

Soobin lo miró con el ceño fruncido, confundido al ver la reacción de Chan. Sin embargo, al observar a Felix, entendió el motivo. La cintura de Felix, tan pequeña y sorprendentemente delicada, contrastaba con la agilidad y precisión de sus movimientos.

Soobin (susurrando): "Wow... no pensé que Felix tuviera esa figura."

Hyunjin, por su parte, mantenía una expresión aparentemente indiferente, aunque su mirada se mantenía fija en Felix. La imagen de aquella pequeña franja de piel lo tenía más atento de lo que quería admitir.

Chan, aún impresionado, miró a Hyunjin y sonrió con picardía. "¿No les parece raro? Jamás me hubiera imaginado que Felix tendría esa... ¿cómo decirlo? Esa figura."

Hyunjin (haciendo una mueca, sin querer mostrar su interés): "Bah, solo es una cintura. No es para tanto."

Pero a pesar de sus palabras, su mirada volvía involuntariamente a Felix, quien ahora estaba de espaldas a ellos, terminando su rutina con una precisión que denotaba años de práctica. Aunque Hyunjin trataba de ignorarlo, algo en aquella imagen de Felix le resultaba intrigante, incluso molesto, como si la figura del chico captara su atención más de lo que estaba dispuesto a admitir.

Felix, sin saber que estaba siendo observado, se tomó un breve descanso y se acomodó el cabello, aún concentrado en su entrenamiento. La naturalidad de su postura y la confianza en su rostro aumentaban su atractivo sin que él siquiera lo notara.

Chan (bajando la voz, aún sonriendo): "Oye, Hyunjin, deberías admitirlo. Ese chico sabe cómo llamar la atención, y sin ni siquiera intentarlo."

Hyunjin rodó los ojos, pero su mirada aún estaba fija en Felix. Aunque pretendía mostrarse desinteresado, una parte de él sentía una mezcla de curiosidad y frustración, especialmente al ver cómo sus propios amigos parecían admirar a Felix. Sin poder controlarlo del todo, apretó los dientes y cruzó los brazos, mientras la imagen de esa pequeña cintura quedaba grabada en su mente más de lo que le hubiera gustado.

Mientras Felix practicaba, uno de sus compañeros se acercó, señalando discretamente hacia donde estaban los amigos de Hyunjin, quienes, aunque intentaban pasar desapercibidos, no dejaban de mirarlo con evidente interés.

Compañero: "Felix, ¿esos de allá son tus amigos?"

Felix se giró, curioso, y notó la presencia del grupo. Hyunjin, al darse cuenta de que Felix los había visto, rápidamente desvió la mirada y, para disimular, le dio un pequeño golpe en el hombro a uno de sus amigos, fingiendo que estaba inmerso en una conversación.

Felix sonrió de lado, un toque de diversión en su expresión. "Mm... solo uno," respondió, mirando a Chan con una sonrisa amistosa. Luego añadió: "De hecho, me sirve que estén aquí; tengo sed."

Sin pensarlo mucho, Felix caminó hacia Chan y le pidió un poco de agua. Chan, todavía sonriendo de manera cómplice, le ofreció la botella, sin decir nada. Felix inclinó la cabeza ligeramente y comenzó a beber, cerrando los ojos mientras el agua fresca aliviaba su sed.

Mientras Felix tomaba agua, Hyunjin no pudo evitar observarlo con detenimiento. Había algo hipnótico en la manera en que bebía: la forma en que inclinaba la cabeza, los labios rozando la boca de la botella, y cómo una pequeña gota de agua resbaló lentamente por la comisura de su boca, dibujando un delicado rastro en su piel. Era un detalle simple, casi insignificante, pero por alguna razón, le pareció completamente cautivador.

Hyunjin frunció el ceño, molesto consigo mismo por quedarse tan absorto. "¿Qué demonios me pasa?", pensó, mientras apartaba la mirada rápidamente, intentando ignorar la extraña mezcla de frustración y fascinación que sentía.

Chan, notando la reacción de Hyunjin, apenas pudo contener una sonrisa. Sabía que algo estaba sucediendo entre ellos, aunque ninguno de los dos parecía dispuesto a reconocerlo aún.











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