En secreto

Idiota

Durante esos días, Hyunjin y Félix no paraban de pelear.

Kai: "¡Chicos! ¡Si hubieran visto lo que acabo de ver!"

En ese momento, Félix entra con dos ramos de flores, uno de gardenias y otro de tulipanes. Sin decir nada, comienza a desarmarlos y a regalarlos a las chicas del salón. Luego, le da uno a la chica que está al lado de Hyunjin.

Chica: "¿Qué pasa, Félix? ¿Por qué regalas estas flores?"

Félix: "Un amigo me las regaló, pero está demasiado pesado con esto, y ya le dije que no me gusta. Me importa un carajo lo que me regale. ¿Quieres más?"

Chica: "¡Sii! Amo las gardenias"

Felix se alejo y boto las flores que sobraron por la ventana y simplemente se sentó

Kai: "Hyunjin, tienes competencia "

Hyunjin lo golpeó, ya le había aclarado que Felix no le gustaba, pero el seguía molestando

Poco después, el chico que le había dado las flores a Félix aparece de nuevo, esta vez con más ramos, uno lleno de rosas rojas y otro de lirios.

Chico: "Aquí tienes más. Sé que te gustan."

Félix lo mira con desprecio y hace un gesto de rechazo, cruzando los brazos.

Félix: "¿No lo entiendes? No me gustan tus flores, no me interesa lo que me traigas."

Pero el chico no se da por vencido y sigue insistiendo.

Chico: "Solo quiero que las aceptes."

Félix lo ignora por completo y se levanta, dándose la vuelta. Al ver que el chico finalmente se va, Félix suspira y, sin pensarlo mucho, toma las flores y se las entrega a la chica que le había pedido las gardenias.

Félix: "Aquí tienes, para ti."

La chica sonríe, agradecida, mientras Félix regresa a su asiento, claramente cansado de la insistencia del chico.

Hyunjin: "allá la gente que no diferencia el bachillerato de un k drama"

Felix se levantó enojado y se acercó al puesto de Hyunjin

Félix: "Ay, pobrecito, está ardido. Como a ti no te dan la hora", dijo mientras apoyaba sus manos en el escritorio de Hyunjin.

Hyunjin abrió la boca para defenderse, pero Félix rápidamente le puso una mano en la boca.

Félix: "Acepta que yo también soy guapo y recibo atención. Oh, perdón, se me olvidó que ya lo admitiste aquella noche", le guiñó un ojo y se regresó a su puesto.

Los compañeros comenzaron a gritar y abuchear, disfrutando de la tensión entre los dos. Algunos aplaudieron mientras otros murmuraban entre sí, mirando a Hyunjin, que ahora estaba completamente rojo de ira y vergüenza.

Félix, vestido con un shorts roja, medias para el invierno que llegaban justo por encima de las rodillas y un buzo negro, se recostó cómodamente en su asiento, con la mirada desafiante, mientras las risas seguían resonando por el salón. Hyunjin, que llevaba una camisa ajustada bajo un buzo negro y un pantalón rojo, no pudo evitar fijar la mirada en Félix mientras éste bajaba las escaleras del salón.

La forma en que Félix caminaba, con una confianza que desbordaba, hizo que Hyunjin tragara saliva y bajara la vista, tratando de ocultar el efecto que esa imagen le causaba. Su mirada no pudo evitar recorrer de arriba a abajo la figura de Félix, observando cada detalle de su atuendo, desde la forma en que las medias se ajustaban a sus piernas hasta la manera en que el buzo blanco resaltaba su figura. Algo en su estómago se revolvió, pero no quería mostrarlo.