CAPITULO 11 .-No Te Quiero Volver A Ver-.

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Los primeros rayos del amanecer se filtraban por la ventana del apartamento de Aurora, llenando la habitación de una luz tenue. Kylie parpadeó lentamente al despertar, sintiendo el peso de la noche anterior y las emociones que aún revoloteaban en su mente. Al girarse, vio a Aurora a su lado, con una expresión tranquila que le resultaba desconcertante.

Kylie respiró profundo y se incorporó, sintiendo una mezcla de dolor y resentimiento. Se pasó una mano por el cabello, intentando ordenar sus pensamientos antes de hablar.

-Aurora... -comenzó con voz firme, aunque su mirada era fría-. No voy a perdonarte tan fácil por lo que hiciste. Lo que has causado, lo que me hiciste pasar... -Su tono era cortante, cargado de resentimiento. Las palabras salían directas, y su expresión era una mezcla de decepción y determinación.

Aurora, aún algo adormilada, la miró con una sonrisa tranquila, aunque había un destello de sorpresa en sus ojos al notar la frialdad de Kylie.

-¿Perdonarme? -respondió Aurora, en un tono entre incrédulo y juguetón-. Kylie, todo esto no es más que parte de algo que tú también querías. Lo sé, lo sentí anoche. Quizá tú lo veas como un error, pero yo lo veo como... el comienzo de algo que ninguna de las dos puede negar.

Kylie apretó los labios y negó con la cabeza, cada palabra de Aurora le parecía una excusa más para justificar sus actos. Recordó el caos que había dejado atrás, la ansiedad y el miedo que había sentido al ver cómo su vida se veía expuesta por alguien que apenas conocía. Al final, solo le importaba una cosa: recuperar su vida y su estabilidad.

-¿Sabes algo, Aurora? -dijo en tono sarcástico, con una mueca amarga-. Tienes razón en una cosa... cometí un error, pero fue el de confiar en ti, el de creer en tus palabras. Pero eso se acabó. No eres quien pensé que eras, y no voy a dejar que sigas jugando conmigo.

Aurora la observó, con una mezcla de interés y ligera frustración, y en sus ojos se podía ver el reflejo de algo más profundo, algo calculador y complejo. Kylie se levantó de la cama, sin mirarla de nuevo, y comenzó a vestirse rápidamente.

Mientras se ajustaba la ropa, sentía que cada acción le ayudaba a recuperar el control, a reforzar la distancia que deseaba poner entre ambas.

-No quiero volver a verte, Aurora -dijo finalmente, con una dureza en su voz que no permitía espacio para objeciones.

Aurora la observó en silencio, su sonrisa enigmática regresando, como si viera algo en la situación que Kylie no lograba percibir.

-Sabes, Kylie... -dijo en un susurro mientras la veía dirigirse hacia la puerta-. Puedo ser paciente. Tal vez no hoy, ni mañana, pero algún día entenderás. Nos volveremos a ver... y cuando eso pase, tal vez entonces puedas ver las cosas de otra manera.

Kylie no respondió. Salió del apartamento sin mirar atrás, dejando el eco de las palabras de Aurora resonando en el ambiente.

Cuando Kylie cerró la puerta del apartamento de Aurora, ésta se quedó en silencio, observando el lugar por donde había salido. Un suspiro escapó de sus labios mientras una sonrisa astuta y determinada se dibujaba en su rostro. Se sentó en el borde de la cama, su mente ya maquinando un plan para recuperar a su Kylie.

Aurora sabía que Kylie había intentado mostrarse firme y distante, pero también conocía la vulnerabilidad que se escondía detrás de su fachada. Había visto ese lado de ella en sus momentos íntimos, en las miradas y las palabras compartidas en medio de la noche. Sabía que, por más que Kylie intentara alejarse, había una parte de ella que todavía estaba atada a lo que había entre ambas.

"No será fácil", pensó, con una mezcla de desafío y deseo. Aurora entendía que había cruzado una línea y que Kylie necesitaba tiempo para procesar lo ocurrido. Sin embargo, estaba convencida de que, en el fondo, Kylie seguía siendo susceptible a su presencia, a la conexión que ambas habían forjado en tan poco tiempo.

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