['THE BOY IS MINE'] °PERISSE° PERCY JACKSON

Verdadera amistad

Después de todo el caos en la captura de la bandera y de ser reclamado por mi padre, fui llevado a mi nueva cabaña. Esta era solo para mí.

Genial, ¿no? Pura soledad. Qué divertido, ¿se nota el sarcasmo?

Si tuviera a Clarisse aquí conmigo sería mucho mejor. No la he visto desde hace horas y eso me preocupa.

Maldita sea, está claro que la lanza era importante para ella y ahora está rota.

Tal vez pueda animarla, pensé.

Me senté en la cama luego de curiosear toda la cabaña. Aquí cabía bastante gente. Me eché hacia atrás, sintiendo el dolor de mi cuerpo. Aunque el agua me había curado, aún sentía incómodo el brazo, además de que estaba hecho trizas.

Me dolía todo.

Intenté relajarme, pero mi mente seguía dándole vueltas a la batalla y a Clarisse. La cabaña, aunque espaciosa, se sentía vacía y fría. Estar solo aquí no era lo que imaginaba.

De repente, escuché un golpe suave en la puerta. Me levanté con esfuerzo, cada movimiento enviando una punzada de dolor por mi cuerpo.

-¿Quién es? -pregunté, tratando de mantener la voz firme.

La puerta se abrió lentamente y apareció Clarisse, con el rostro lleno de desánimo.

-Clarisse -dije, levantándome, pero ella cerró la puerta detrás de ella, me obligó a sentarme y luego recostó su cabeza en mis piernas.

Aunque estaba confundido, no dije nada. Solo dejé que mis dedos se enredaran suavemente en su cabello, acariciando cada mechón con ternura.

Clarisse cerró los ojos, y por un momento, todo el peso de la captura y las preocupaciones parecieron desvanecerse. Podía sentir su respiración tranquila mientras el tiempo pasaba lentamente, un oasis de calma en medio del caos.

-¿Estás bien, hermosa? -pregunté, con un tono suave.

Clarisse suspiró, se levantó y me miró con sus hermosos ojos marrones.

¿Por qué tenía que ser tan increíblemente hermosa? Tanto que dolía.

-Estoy bien... solo algo desanimada. ¿Y tú? ¿Cómo te sientes con ser reclamado y ser hijo de Poseidón?

No quería hablar de eso ahora. En este momento, solo quería concentrarme en ella y solo ella. Nada más importaba.

-Eso es otro tema, linda... ¿Cómo te sientes respecto a lo de tu lanza? La que rompió el simio de tu hermano.

-Molesta -resopló-. No es más que un idiota, siempre ha querido superarme y ser mejor que yo en todo.

-Dudo que lo logre -le sonreí mientras tomaba su mentón delicadamente-. Tú eres increíble e insuperable, Clarisse.