Cuando Volvimos a Encontrarnos | Germán Usinger, Unicornio

Capítulo 17

Emilia se despertó con los rayos del sol pegándole en la cara, un poco aturdida por la resaca emocional que traía. Miró alrededor y se dio cuenta de que estaba en el sofá, abrazada con Nicki, que ya estaba despierta, pero no la había querido mover. Sabía que Emilia había pasado una noche terrible llorando y, por más que Nicki ya estaba despierta hacía rato, decidió que no era el momento de hacerla levantarse.

Emilia se estiró y soltó un largo suspiro, tocándose la cabeza como si pudiera aliviar el dolor que sentía ahí. "¿Qué hice?", pensó, recordando lo de la noche anterior, la pelea con Germán, la puerta cerrándose con fuerza, y todo lo que había quedado en el aire.

Nicki, al verla despertarse, le sonrió suavemente, aunque con cara de preocupación. La situación no era fácil, y sabía que Emilia estaba atravesando una tormenta de emociones.

—¿Cómo andas, Emi? ¿Te sentís un poco mejor?

Emilia se sentó, pasó la mano por su cara y miró a su amiga. —Nada bien, Nicki. No sé qué hice. No sé si fue lo correcto... Hablar con Germán, decirle todo eso... y ahora, Rodrigo también está molesto. ¿Qué se supone que haga? Siento que la cagué, posta.

Nicky la miró con una mezcla de cariño y comprensión.
—Emi, mirá, lo que pasó ya pasó. Si lo que hiciste fue lo que sentías en ese momento, está bien. No podés quedarte con el 'qué hubiese pasado si'. Ahora tenés que pensar en lo que realmente querés para ti.

Emilia bajó la mirada, como si las palabras de su amiga le dieran un poco de calma, pero no le alcanzaban para tranquilizar su mente. "No sé, Nicki. Es increíble lo que logramos y Germán es un buen tipo, pero... Rodrigo también es mi amigo de toda la vida. Y ahora no sé cómo enfrentarlo. ¿Por qué todo tiene que ser tan complicado?

Nicky sonrió, aunque con tristeza en los ojos. —Porque así es la vida, Emi. A veces, las cosas se complican. Pero lo importante es que vos te cuides y tomes las decisiones que te hagan bien, sin pensar tanto en lo que los demás esperan de vos.

En ese momento, el teléfono de Emilia vibró sobre la mesa. Miró la pantalla y vio que era un mensaje de Rodrigo. Su corazón dio un salto, no sabía si estaba lista para enfrentar lo que venía.

Carru 🧡🦦

Hola Emi, sé que capaz vas a ser vos la que no quiere hablar conmigo, pero la verdad que necesito hablar con vos. Este evento es la otra semana, y quiero que aprovechemos para vernos. Ojalá puedas llegar, porque esto es algo muy importante para mí.

Te envío la invitación por si decidís venir

Emilia leyó el mensaje varias veces, tratando de entender qué quería realmente. ¿Rodrigo intentaba arreglar las cosas o solo quería dejar las cosas claras? No tenía ni idea.

—¿Qué pasó? ¿Es Rodrigo?—Dijo Nicki preocupada

Emilia asintió mientras dejaba el teléfono sobre la mesa. —Sí, me está pidiendo que nos veamos la otra semana. Dice que es algo importante.

Nicki la miró con cara de preocupación. —¿Vas a ir?

Emilia suspiró y se echó hacia atrás en el sofá.

—No sé... no tengo ni idea qué hacer. Si lo llamo, si le contesto o si lo dejo pasar. Siento que todo se me está viniendo encima.

Nicki se acercó y la abrazó, dándole un poco de consuelo. —Mirá, Emi, lo que pasa entre vos y Rodrigo es una amistad de años, no lo vas a tirar por la borda por algo que pasó hace poco. Lo mismo con Germán. ¿Por qué no pensás en lo que vos querés realmente, sin tanta presión? No te apresures. Aclara tu mente y cuando sea el evento vas a estar lista.

Emilia la miró, sintiendo que las palabras de Nicki la ayudaban un poco, pero igual no tenía respuestas claras.
—Lo sé... pero no sé si estoy lista para ver a Rodrigo. Todo se siente tan raro ahora. ¿Y Germán? ¿Lo que hice con él? No puedo dejar de pensar que lo lastimé.

Nicky suspiró y se acomodó al lado de ella. —A veces, lo que pasa entre amigos es más complicado que lo que pasa en una relación. Pero también, vos tenés que ser honesta con vos misma. Si no te sentís bien con lo que hiciste, hablalo, aclaralo. No es tarde para arreglar las cosas.

Emilia asintió, aunque sabía que las cosas no se iban a resolver en un par de palabras. Había mucho por procesar, mucho por enfrentar. Pero al menos, con la ayuda de Nicky, sentía que podía empezar a tomar decisiones. Solo esperaba no arrepentirse de lo que hiciera.