capitulo 11: vita nostra

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El equipo de marketing comenzó a instalar sus cosas nuevamente, sus rostros llenos de alivio y sonrisas. La atmósfera de tensión que había impregnado el lugar minutos atrás se disipó rápidamente, reemplazada por un bullicio de entusiasmo renovado. Cajas se abrían, documentos se organizaban y las voces llenaban el espacio con una energía que casi podía palparse.

Mientras tanto, vi cómo algunos de los miembros del equipo se reunían alrededor de una mesa, gesticulando y discutiendo con emoción. Estaban decididos a tomar decisiones importantes, quizás sobre el próximo paso de la campaña para Vita Nostra. Su pasión era evidente, y me recordó por qué había luchado tanto por ellos.

A medida que los observaba, sentí un profundo orgullo. Estos no eran solo empleados; eran un equipo que había superado desafíos y había demostrado que, cuando se trabaja juntos, no hay obstáculo que no se pueda superar. Y ahora, más que nunca, estaban listos para darlo todo por un proyecto que representaba no solo una oportunidad, sino una afirmación de lo que éramos capaces de lograr.

"Equipo, necesito que todos se reúnan," dije con voz firme, asegurándome de captar la atención de cada uno. Los murmullos cesaron, y todos se volvieron hacia mí. "Quiero que sepan algo importante: en unos meses lanzaremos un nuevo producto, Vita Chocolat. Y necesito todo su empeño, toda su dedicación, para asegurarnos de que sea un éxito rotundo."

Hice una pausa, dejando que mis palabras calaran hondo. "Ustedes son la clave para que esta empresa prospere. Su trabajo, su creatividad y su pasión han llevado a esta compañía hasta donde estamos. Este nuevo producto necesita ese mismo compromiso. Necesito que cada uno de ustedes dé lo mejor de sí. ¿Entienden?"

Asentimientos y miradas de determinación recorrieron la sala. Había recuperado su lealtad y su confianza, y ahora era el momento de canalizar toda esa energía hacia un nuevo desafío. Sabía que, juntos, éramos imbatibles.

Aunque siempre he detestado trabajar con humanos, debo admitir que, con mi equipo de marketing, las cosas son diferentes. Viktor es quien tiene la habilidad de seleccionar al mejor personal humano; él es quien elige a cada uno, asegurándose de que sus habilidades sean precisamente lo que necesitamos. Tiene un ojo especial para encontrar a aquellos que pueden innovar, adaptarse y entender a la gente de una manera que yo nunca podría.

A pesar de que inicialmente dudé, supe que cada una de las personas que trajo a mi equipo jugaría un papel crucial. Y no me equivoqué. Ellos son importantes. No son simplemente engranajes en una máquina; son los que le dan vida a nuestras ideas, los que convierten nuestros planes en algo tangible y exitoso. Incluso cuando mi naturaleza me lleva a desconfiar de los humanos, he aprendido a confiar en su valía, al menos en aquellos seleccionados por Viktor.

Con mi discurso aún resonando en sus oídos, el equipo comenzó a moverse con una energía renovada. Se sumergieron rápidamente en su trabajo, intercambiando ideas, bocetos y estrategias. La sala se llenó de conversaciones apasionadas, trazos en pizarras, tecleo constante en las computadoras y el sonido de hojas pasando de mano en mano.

Cada uno de ellos estaba decidido a crear una campaña de marketing que no solo fuera digna de nuestro nuevo producto, Vita Chocolat, sino que también lo elevara a un nivel de reconocimiento global. Querían que el mundo no solo conociera nuestro producto, sino que lo desease, que se convirtiera en la opción preferida de miles.

Era más que una simple tarea. Para ellos, era una misión. Y verlos trabajar con tal pasión me recordó por qué este equipo es tan especial. Sabía que, con su creatividad y dedicación, harían que Vita Chocolat brillara como ningún otro producto en el mercado.

Me senté en mi oficina, observando y escuchando con atención mientras mi equipo de marketing compartía sus ideas. Cada propuesta era más creativa que la anterior, y me sentí satisfecha al ver cómo su entusiasmo se traducía en estrategias innovadoras. Al mismo tiempo, sabía que el departamento de innovación de Seraphiel estaba trabajando arduamente en los prototipos de Vita Chocolat para que tuviéramos algo tangible que mostrar a nuestros inversionistas.

VitalLata y SparkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora