𝐂𝐘𝐒𝐌 | ❛ Las cicatrices emocionales pueden parecer cerradas, pero su sensibilidad persiste, lista para reabrirse cuando se tocan las fibras sensibles del corazón.❜
Escapar de los problemas sin resolverlos por completo nunca es la solución. Elowe...
𝟏𝟓 | lies don't last, whatever it is, they'll get you
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Las noticias se propagan con facilidad, los chismes pasan de una oreja a otra en un solo pestañeo. La información que se propagó por Busan no fue tan sorprendente; no hacía falta ser extremadamente inteligente para haber sospechado de un asesino serial en una fiesta en la que murieron muchos inocentes. Pero quizás el hecho de que ahora había otro asesino que seguía la tendencia de Ghostface había sido lo que hizo dudar a los ciudadanos y a las autoridades.
Sin embargo, esa duda ya no existía. El video que tenía el detective tuvo que ser visto por sus compañeros de trabajo para fundamentar sus palabras y evitar inculpar sin pruebas. Esto no tardó en hacerse viral por las noticias, periódicos y pasando de boca en boca, contándose entre sí la situación.
A Beomgyu no le afectaba en nada; sus años en la cárcel no se acortarían por el hecho de que quizás no había sido el asesino en esa fiesta. Él seguía con su condena, nada le cambiaba ahora que se sabía que sí había sido el responsable. Las personas no estaban muy sorprendidas, al igual que las autoridades; casi nadie creía en él y en las palabras que había testificado anteriormente.
La mala vista en todo esto es que era un "casi nadie creía en él", porque había una persona que sí lo hacía. Alguien que había tratado de confiar en él a pesar de no tener motivos para hacerlo, a pesar de no tener acciones fundamentales más que palabras vacías y llenas de mentiras.
────Necesito que me escuches, Wen... ¡no es así como lo dicen los periodistas!─────, exclamó Beomgyu, mientras corría tras ella.
Su cabello rubio había perdido su brillo inicial, viéndose más apagado ahora. Él se había sacado las esposas y escapó tras ella en cuanto supo que se había enterado de la situación frágil en la que estaba. Después de todo, las noticias de este tipo no tardan en esparcirse.
────¿Qué...?
Elowen se volteó a mirarlo, ya sin más opción para escaparse momentáneamente. Tenía una expresión llena de desilusión, sus ojos llorosos y sin brillo.
────¿Ahora qué? ¿Me vas a decir que no fuiste tú el que se autolesionó? ¿No fuiste tú el que cometió todos esos asesinatos, Beomgyu?─────, preguntó, con lágrimas al borde de sus ojos y un rostro levemente rojizo de decepción.
Beomgyu abrió la boca para decir algo, pero rápidamente la cerró y bajó la mirada, viendo el suelo.
────N-no, no, Wen, no fue así...─────, tartamudeó.
────¡Pero no me mientas, no me mientas a mí! ¡Porque... yo te entregué mi corazón a tí!─────, exclamó, con una combinación de decepción y molestia en sus facciones────Yo sí confié en tí Beomgyu, y tú no... y es horrible... por una vez en tu vida di la verdad si vas a querer hablarme.
