Percy Jackson siempre había sido diferente, pero a los catorce años, su vida dio un giro inesperado. Una noche, mientras caminaba por las calles oscuras de Nueva York, una extraña sustancia negra se deslizó sigilosamente hacia él, envolviendo su cue...
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"Mi alma está marcada por las cicatrices de mi incapacidad para proteger a los que más amó "
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Percy tenía un mal presentimiento. Algo andaba mal. Se sentó en su cama, incapaz de conciliar el sueño.
Se sentía inquieto, pasando nerviosamente sus manos por su cabello mientras miraba fijamente un punto en su cuarto.
—Estás muy inquieto, Percy. ¿Qué sucede? —preguntó una voz cercana, llena de preocupación.
—Algo anda mal... Siento que cometimos un error —respondió Percy, su voz cargada de inquietud.
Percy se levantó y caminó hacia el baño. Abrió el grifo y se echó agua fría en la cara, tratando de despejar su mente y calmarse. Mientras el agua goteaba de su rostro, miró su reflejo en el espejo, buscando respuestas que no podía encontrar.
Dentro de él, Venom compartía sus preocupaciones. Aunque no podía identificar exactamente qué estaba mal, también sentía una ominosa presencia, una tensión en el aire que no podían ignorar.
—Percy, hay algo en el aire que no me gusta —dijo Venom, su voz resonando en la mente de Percy—. Como si algo malo estuviera pasando .
— Lo sé , yo también lo siento algo no anda bien .
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