MI verano...MIS reglas

Cap.4:

Cap.4:

Escuche tres golpecitos en mi puerta y fui a abrir.

-Emily reportándose, señor- me hizo un gesto militar y yo se lo devolví.

Entramos en silencio a mi cuarto.

Cuando llegamos de comprar todo, descargamos las cosas del auto sin que nadie nos viera y pusimos todo en mi habitación, comimos algo rápido en la cocina y nos fuimos a dormir con la escusa de que habíamos caminado mucho y estábamos muy cansadas.

-¿Lista soldado?- Emy asintió – Me voy a cambiar -

Ayer aprovechamos y compramos ropa negra para entrar en el papel.

Ya sé, soy muy madura, pero así es más divertido.

Emily se quedo con su pijama de unicornios, necesitaba eso para la broma.

Yo me puse un pantalón tipo militar, solamente que en vez de ser verde esa en la gama de los negros y grises, y una musculosa negra de tirantes, me puse un gorrito negro y para dar el toque final, las dos nos pintamos a cada lado de la cara, dos rayas de color negro.

Agarramos todas las cosas y bajamos por en ascensor en extremo silencio.

Entramos al jardín del hotel y cerramos la puerta.

-Hay que hacer mucho silencio - advertí.

-Bueno- me susurro.

Ahora manos a la obra.

-¿Entendiste lo que tenes que hacer Emy?-

-Si- me sonrió con malicia.

Digamos que ella es el señuelo.

Vamos a disparar las pistolas de bengala para que parezcan disparos de verdad, voy a esperar unos segundos y por el reproductor de música *al que le conecte los mejores parlantes que encontré* voy a poner el ruido de una sirena del auto de la policía.

Emy tiene que estar parada cerca de la pileta, fingiendo que llora, entonces el hermano se va a acercar y con el detergente que va a haber en el piso, se va a resbalar y caer en la pileta, que tiene tinte rosa, con suerte van a caer el y sus amigos.

Cuando empiecen a llegar todos, van a pasar por los sensores de movimiento y eso va a hacer que se enciendan todos los reflectores, y yo voy a estar escondida para accionar el circuito de bombas de pintura que hay escondidos por todos lados

En una hora acomodamos todo, las dos estábamos listas.

-Emy, veni un segundo- ella se acerco y le limpie los restos de pintura de la cara- Listo-

-Gracias- me sonrió – ¿Lista?-

Me reí y asentí.

Ella se paró a unos pasos de la pileta.

-¿Parece que estoy llorando?- ella se había mojado toda la cara y dejo unas gotitas de agua en sus mejillas.

-Si- me reí.

-Genial-

Contuve la risa para no hacer mucho ruido.

Empecé a esparcir detergente alrededor de ella, dejando un espacio para que se pueda correr cuando pase Chase, se supone que tiene que saltar para caer sana y salva en el pasto que hay a unos centímetros de ella.

-¿Lista?-

Le pregunte desde atrás de unos arbustos.

-Súper lista-

-Tapate los oídos- dicho eso se llevo las manos a la zona y yo empecé a dispara las bengalas.