Tú - Justin Bieber y tú.

Capítulo 3

Hoy era miércoles, me levante temprano apenas eran las 8:30am. Me vestí y empecé a bajar las escaleras... Y hay estaba Amalia y Juan en la planta baja de la casa estaban en la sala viendo televisión, empecé a caminar más rápido para llegar a la puerta cuando...

-¿A dónde crees que vas a ir?- Dijo Amalia sin mirarme.

-A la calle- Dije sin interés, abrí la puerta de la casa y Salí de ahí antes que empezara con su escáldalo.

Una vez que llegue ahí toque el timbre y me abrió la mama de mi amiga desaparecida.

-Hola cariño- Dijo abrazándome

-Hola Mary- sonreí

-¿Cómo estas mi nena?- me pregunto dulcemente

-Muy bien- le dije

-¡Bien! Es bueno saberlo- dijo regalándome una sonrisa

-Mary, ¿Emily esta?- pregunte

-No cariño, no está pero te dejo algo- dijo entrando para sacar algo y luego me entrego una carta

-¿una carta? – me pareció extraño

-Si cariño, no sé qué dice pero dijo que te la entregara si vienes a buscarla- Explico Mary

-Ok Mary, entonces me voy- dije

-¿no quieres entrar?- me pregunto

- no, solo venía a ver a Emily, pero no está- dije sonriendo falsamente

-Ok cariño, pero no te olvides de mí.

-No, ¿cómo crees Mary?- dije abrazándola, luego me despedí y me di la vuelta para irme, Mary cerró la puerta.

Camine hasta la acera de frente de la casa y me senté. Abrí la carta empecé a leer y cada vez que leía más me llenaba de rabia y tristeza tanto así que las lágrimas se apoderaron de mí, nunca me avía gustado que me vieran llorar y sin embargo hay estaba yo sentada en la calle llorando... la carta decía que nuestra amistad necesitaba un tiempo; que ella necesitaba crecer y yo se lo impedía. Que lo mejor era que acabáramos nuestra con nuestra amistad por ahora, que ella necesitaba ser alguien más que una simple chica ya que ahora tenía novio.

Todo el mundo la saludaba y respetaba: cosa que no pasaba cuando estábamos juntas, que ella me quería pero que esto es lo mejor para las dos... cuando termine de leer rompí en llanto ¿Acaso esta era Emily? La que ahora me da la espalda por un "novio", ¿Quién era esta estúpida que se hacía llamar mi mejor amiga?

No, me sentí vacía y más sola que nunca. Ahí estaba yo _____ Broks, la chica que no le temía a nada, que se enfrentaba a todo y que no era débil, dejando el paso a _____ Broks: la chica con sentimiento que odiaba que la vieran llorar, la chica que se entregaba a una amistad con el corazón... estaba destruida, no ponía atención de a lo que pasaba a mi alrededor solo sentía que mi corazón se encogía de dolor, luego sentí que alguien se sentó junto a mí, no le voltee la cabeza, lloraba mirando mis pies con la carta entre las manos pero podía adivinar que era un niño de 9 o 10 años.

-¿Qué te pasa?- Dijo, yo alce mi cara y lo mire, apuesto que yo estaba enjuagada de lágrimas.

-Nada- dije limpiándome mis lágrimas con mis manos

-No te creo, uno no llora por nada- Dijo sentándose a mi lado, abriendo sus brazos dándome una señal que necesitaba yo solo le sonreí –Anda, te prometo que no voy a morder – dijo tan inocentemente y me tire en sus brazos, como necesitaba un abrazo en estos momentos...-Ahora dime ¿Por qué estabas llorando?- dijo

-Me siento sola no tengo a nadie- le respondí su pregunta aun abrazándolo y sentí que el suspiro

-¿y tus amigos?- me pregunto yo me solté del abrazo y lo mire a los ojos

-No... no tengo-Susurre triste el solo sonrió

-Claro que si tienes y te están esperando allá- dijo y yo lo mire confundida – ¿porque no vuelves a Canadá _____? – cuando dijo eso se me erizo la piel... ¿Cómo sabe eso? ¿Cómo sabe mi nombre? ¿Es brujo o algo parecido? O ¿me estoy volviendo loca por tanto sol que he llevado?

- ¿Qué? ¿Cómo sabes eso? – le pregunte confundida el solo me sonreía

-Lo importante es que lo sé y estoy aquí para recordártelo- dijo yo lo miraba nerviosa -¿Por qué no vuelves, si sufres mucho aquí?- dijo poniéndose de pie

-he... Yo...-estaba nerviosa no entendía que era lo que pasaba –No... no puedo – dije

-¿Por qué no? Si tu padre está en New York – dijo con firmeza y yo abrí los ojos como platos, no podía negar que este niño me dio miedo...- bueno me tengo que ir creo que te estoy poniendo nerviosa, adiós- dijo con una sonrisa y empezó a caminar por la acera me dedique a observarlo mientras se iba pero me distraje porque una hormiga me estaba picando en mi pie, ¡Agh puta muere! Cuando voltee a observarlo de nuevo no estaba... ¿desapareció?

Dios eso si me dio miedo, ¿será que estaba alucinando?... bueno como sea esa carta me hizo efecto... cuando voltee a donde el niño misterioso se había sentado había...había una foto de... ¿mis amigos de Canadá? , recogí la foto con mis manos temblorosas y la observe muy bien y si eran ellos hay estaban Caitlin, Ryan, Christian, Chaz y... Justin estaban todos juntos... ¿Pero cómo... como llego esto aquí? tenía tantas preguntas y sin respuestas obvias...No sabía que hacer quería irme de aquí pero no puedo...

-Dios ¿Qué hago?- Susurre mirando al cielo, no pasaron ni 5minutos cuando un avión iba pasando por el vecindario –Se, lo que quieres y voy hacer lo posible por lograrlo-sonríe-¿Si pido un auto me lo darás?-No tuve respuestas-¿No? Ok, ya estoy loca - Dije poniéndome de pie con una sonrisa, estaba decidida hacer eso aunque sea una locura...