𝗜𝗡𝗩𝗜𝗦𝗜𝗕𝗟𝗘 𝗧𝗛𝗜𝗡𝗚𝗦, nishimura riki ( 🧸 )
━━son las pequeñas cosas invisibles las que más amo ₊˚.
Cuando Jungwon obligó a su mejor amigo a hacer una promesa, un par de cosas habían cambiado. Porque, estar cerca de ella ahora era algo p...
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Ni-ki cruzó el umbral con pasos titubeantes, como si cada uno de ellos lo acercara más al borde de un abismo emocional del que no sabía si podría regresar. El interior de la casa de los Yang siempre le había resultado familiar, casi como un segundo hogar, pero esa tarde se sentía diferente, como si las paredes lo observaran, como si supieran el peso de lo que estaba a punto de suceder. El silencio entre ambos era palpable, cargado de preguntas sin responder. Yoon lo guió hacia la sala de estar, donde la luz cálida de una lámpara iluminaba el espacio acogedor. Ni-ki se sentó al borde del sofá, demasiado tenso para relajarse, mientras Yoon tomaba asiento en un sillón frente a él. Su postura era tranquila, pero sus ojos no dejaban de analizarlo, como si intentara descifrar qué lo había llevado hasta allí.
—Entonces... ¿qué pasó? —preguntó ella con suavidad, rompiendo el silencio. No había juicio en su tono, solo curiosidad genuina. Pero para Ni-ki, la pregunta se sintió como un desafío.
Él bajó la mirada hacia sus manos, que estaban entrelazadas en su regazo. Respiró hondo, tratando de ordenar sus pensamientos. Hablar con Yoon era mucho más difícil de lo que había anticipado. La última conversación que habían tenido seguía fresca en su mente: las palabras que ella había dicho, la forma en que lo había mirado... todo eso lo había perseguido desde entonces. Porque sabía que había sido él quien volvió su amistad incómoda, él la había ignorado y se había alejado primero.
—Terminé con Rei —confesó finalmente, levantando la mirada para observar su reacción.
Yoon no pareció sorprendida. Su expresión permaneció neutral, pero hubo un destello de algo en sus ojos, una emoción que Ni-ki no pudo identificar. Después de un momento, ella asintió lentamente.
—¿Por qué? —preguntó, su voz todavía tranquila, pero había una nota de cautela en ella. Era como si no quisiera asumir nada, como si esperara que él fuera quien llenara los vacíos.
Ni-ki sintió cómo su pecho se apretaba. Sabía que esa conversación no sería fácil, pero enfrentarse a esa pregunta directamente lo hizo sentirse más expuesto de lo que estaba preparado para soportar.
—Porque... no podía seguir con algo que no era real —admitió, eligiendo sus palabras con cuidado. No quería decir demasiado, pero tampoco podía mentirle. No a ella—. Rei merece estar con alguien que realmente la quiera, alguien que pueda darle todo. Y yo... no podía hacerlo.
Yoon lo observó en silencio durante unos segundos. Sus ojos buscaban algo en los de él, alguna pista, alguna verdad oculta. Cuando finalmente habló, su voz era más suave, pero también más directa.
—¿Y qué hay de ti? —preguntó—. ¿Esto es por alguien más?
La pregunta hizo que el corazón de Ni-ki se acelerara. Era la misma que Rei le había hecho, pero esta vez sonaba diferente. No había acusación en la voz de Yoon, solo un interés genuino. Ni-ki no supo si eso lo hacía más fácil o más difícil de responder.
