Viernes 9 de noviembre del 2007
Estoy en un armario, mis papás están discutiendo de nuevo ¿por qué lo hacen? ¿Es que no se dan cuenta de que me duele? Los adultos no deberían ser así, las personas no deberían de crecer. Todo sería mejor si fuéramos niños por siempre.-¡Lárgate, es lo único que puede hacer un cobarde como tú! -Mi mami está gritando. ¿Por qué todas las personas mayores gritan en vez hablar?
-¡Eso voy a hacer! No soporto más tiempo en esta casa -dice papá arrastrando las palabras.
-¿Y qué esperas?
-¡Nada!
Se escucha el golpe de la puerta al cerrarse.
No sé qué sucede, ¿mi papi se ha ido?
Salgo del armario y bajo corriendo las escaleras.
Mi mamá esta hincada en el piso de la sala, paso a su lado y salgo; mi papá está a unos cuantos metros de mí.-¡Papi! ¡Papi! -grito tanto como puedo.
Él voltea, me mira y se detiene.
-¿Qué carajos quieres Evolet? -dice enfadado, me asusta un poco y retrocedo.
-¿A dónde vas? -pregunto tímidamente.
-¿Eres estúpida o qué? ¡Me largo de aquí, tú y tu madre son un maldito problema!
-Pero papi, yo te quiero mucho -respondo sollozando, él no dice nada así que lo abrazo, al menos eso intento, porque inmediatamente él me empuja y caigo al suelo.
-¡Eres una maldita llorona, Evolet!
-Papá, no te vayas. No me dejes sola-. Me incorporo y le suplico de rodillas.
-¡Joder Evolet! -Se pone a mi altura y puedo sentir su aliento, uno que conozco muy bien-. Deberías saber que eres un estorbo -se levanta y escupe-. Tú y tu madre van a terminar solas por jodidas sentimentales. Si no fueras tan maldita llorona quizá te querría un poco, lástima que no se puede -dice con burla.
Entonces se va y ruego que regrese, para poder ser una familia feliz al menos por unos segundos; pero no lo hace, ni siquiera voltea a verme por última vez.
Lo veo desaparecer cuando da vuelta a la calle y, a pesar de que un nudo se forma en mi garganta, no lloro. De pronto mi madre me toma del brazo y me obliga a entrar a la casa, al mirarla me doy cuenta de que está llorando y entonces, a pesar de no comprender por completo las palabras de papá, entiendo que la única manera de no tener sentimientos es morir.
.
.
Miércoles 6 de octubre del 2010
Mi mamá está en la sala trabajando desde su computadora, me tiene que cuidar ya que mi padre ha venido todos los días de la semana pasada, han pasado tres años desde que se fue; no nos había buscado hasta ahora, mi mamá me contó que solo lo hace porque no tiene dinero y yo le dije que tal vez ha cambiado, «las personas no cambian» fue lo que me respondió.
.
.
Miércoles 20 de octubre del 2010
Ayer mi papá entro a la casa por mi culpa, debí preguntar quién era antes de abrir; cuando me di cuenta de que era él intenté abrazarlo, pero lo único que conseguí fue caer al suelo. Le pidió dinero a mi mamá y luego se marchó.
.
.
Jueves 20 de octubre del 2011
Hace exactamente un año vi a mi padre por última vez, supongo que ya no necesita dinero, lo extraño mucho. La semana pasada mis compañeros se rieron de mí en el festival de la escuela porque mi papá no fue, me dijeron que seguro no tenía padre y les respondí que sí pero que se había ido, se rieron más fuerte y comentaron que ni mi padre me soportaba.
Y creo que sí, se fue porque no me soportaba, él lo dijo.
.
.
Sábado 3 de octubre del 2015
Hoy cumplí 15 años y no me gusta para nada celebrarlo, a pesar de que signifique un año menos de esta jodida vida. A menudo pienso que no le importo a nadie y lo confirmo hoy, ya que mi madre ni siquiera recordó mi cumpleaños. Igual es mejor así, nada de celebración o abrazos fingidos. Han pasado cinco años desde que vi a mi padre por última vez, cinco malditos años, ¿qué padre abandona a su hija a tan corta edad? Quizá sólo el mío.
.
.
Sábado 3 de junio del 2017
Me siento sola y triste, últimamente siempre me siento así.
Tomo la cuchilla y hago un pequeño corte en mi muñeca izquierda, pero con eso ya no es suficiente. Sería mejor morir de una vez.
Hago un corte vertical por todo mi antebrazo izquierdo, lo bastante profundo para que la sangre empiece a fluir. Cierro los ojos y espero el final, pero un grito de horror hace que los abra de golpe, se me ha olvidado poner seguro a la puerta.
.
.
Sábado 4 de noviembre del 2017
Me encierro en el cuarto y busco con desesperación el frasco de los somníferos que le robé a mi madre, ¿por qué ella insiste en que viva si ya no quiero? Encuentro el bote y busco la botella de vodka que escondí entre mi ropa interior. Tomo 8 pastillas con la bebida y espero con ansías mi muerte.
.
.
Domingo 5 de noviembre del 2017
¡Carajo, sigo viva!
ESTÁS LEYENDO
Más allá de las palabras
Teen FictionA sus tan sólo 17 años de vida Evolet ha atravesado por el intento de suicidio en dos ocasiones, ambas en un lapso de menos de seis meses. Esta vez la tercera no será la vencida, ya que en su vida aparecerá Alejandro, un chico que entorpecerá las co...