CHAINED IN HELL ; Tom kaulitz.

Taking out the monster.

Pov’s Tom:

—10 años antes.—

"21 de abril del 2001."

"10:00 p.m."

Seguí a mi padre para ver lo que quería mostrarme. Él entró a mi habitación, se me hizo extraño ya que no se podría encontrar nada en esta, pero igual seguí al borracho de mi padre.

"Ven Tom, toma asiento." Señaló mi cama, viéndome fijamente.

Sin decir nada, hice lo que pidió, sentándome en la orilla de la cama, quedando enfrente de él. Mi padre saco de su bolsillo un pañuelo, al igual que una pequeña soga. Después de eso se acercó, colocando el pañuelo en mis ojos.

"¿Qué haces, padre?" Quite ese molesto pañuelo de mí, aventando la mano de mi padre, viendo serio su comportamiento extraño.

"Vamos a jugar, ¿no quieres?" Pregunto con una pequeña sonrisa.

Me levante de la cama, esta vez estaba decidido a irme, después de todo mi padre no me haría nada, a la única que golpeaba era a mi madre.

"No, gracias. Tengo mejores cosas que hacer." Camine a pasos lentos para salir de la habitación.

La mano de mi padre bruscamente, hizo que me detuviera.

"No me importa… Yo quiero que juegues conmigo. No pedí que hablaras, soy tu padre y debes obedecer." Me jalo del brazo, haciendo que me sentará de nuevo de golpe en la cama.

Empezó a irritarme su comportamiento, ahora lo que mi padre quería hacer era aburrirme, Pero no quería perder el tiempo escuchando a un borracho.

"Puedes decirle a Bill, él probablemente si quiera jugar." No mentía, Bill siempre deseo que mi padre le prestara atención, así que esta era la oportunidad para él. Yo no quería, no me importaba.

"No quiero a Bill, ahora te quiero a ti, Tom." De nuevo mi padre estaba colocando el pañuelo en mis ojos, no solo eso, también colocó la soga en mis muñecas.

Este juego iba a lastimarme, esto no era un maldito juego, lo se perfectamente, pero que podía hacer un niño ante un hombre mucho más grande y fuerte que él.

——————————————

"10:20 p.m."

"Si, aahg…. Esto se siente bien."
Que desagradable voz, pero lo más desagradable fue escuchar mi quejido. Nadie tenía el derecho de hacerme esto, el único que tenía que sufrir, era alguien más, no yo.

"¡¡Me duele!! ¡¡Suéltame!!" No, eso no hizo nada, me enfadaba esto, el único que quería hacer sufrir a la gente, era yo. No tenía porque yo sufrir y escuchar mis lamentos.

"Padre, qué haces…?"

Eres un sucio viejo, creía que a la única que lastimaba aquí era a mi madre, pero ahora me lo esta haciendo a mí, verdad, padre…

"Suéltame… ¡Quítame eso de mí!"

"¡¡Cállate, Tom!! ¡¡Soy tu padre, no debes responderme!! ¡¡Soy el dueño de esta casa, de todo esto, de ti…!! ¡¡No debes responder a tu dueño!!"

"Uhm..." Que porquería son esos ruidos saliendo de la boca de mi padre, solo quiero quitarlo de encima mío, él me esta lastimando ahora a mí.

"¡Suéltame, me duele!" Pedí a gritos, pero mi padre no me hizo caso.