Los idiotas también se enamoran.

novios y sorpresas 1

NARRA ALEXA:

El año ya se está acabando y Seth es lo mejor que me puede haber pasado este año, Sara y Alex viven en un departamento y nos visitan todos los días por las tardes, mis padres están más tiempo en la casa, Natasha volvió a su casa pero estudiara en la misma universidad que yo, nada podría ser mejor de lo que es.

Así que aquí estoy en mi fiesta de graduación junto con Seth y mis mejores amigos.

- ¿Bailemos?

- Claro.

Seth me dio su mano y nos fuimos a la pista de baile donde estaba Sara con mi hermano bailando, se veía tan bien así como estaba con su vestido y su bebe, si, Sara y Alex serán padres en muy poco tiempo, la noticia afecto mucha a Sara ya que era muy joven para ser madre y sus peores temores la asechaban, pensaba que mi hermano la dejaría sola con un bebe, pero eso no fue así cuando mi hermano se enteró, corrió donde estaba Sara y se la llevo a vivir con él a su nuevo departamento, que por supuesto lo compro después de enterarse de la noticia, mis padres estaban muy felices y los de Sara igual ya que Sara es su única hija y ellos aún son jóvenes.

El baile había terminado y estábamos con Seth en su auto.

- ¿Que haremos ahora preciosa?

- No lose, tu les dijiste a mi padre que me cuidarías.

- Y eso haré tontita.- me dio un corto beso en los labios y arranco el coche.

Íbamos en un camino que daba a la playa.

- Bueno princesa necesito vendarte los ojos porque donde iremos será una sorpresa.- se sacó su corbata y la puso en mis ojos.

- Seth sabes que no me gustan las sorpresas.

- Esta estoy seguro que te encantara.

Paro el coche y se bajó para poder abrirme la puerta del coche.

-Seth sácame esta cosa.

- Como tu mandes.- me saco la venda y lo veo no lo puedo creer.

Un muelle lleno de luces y una mesa preparada para 2 persones en medio del muelle con pétalos de rosas que guiaban el camino a la hermosa mesa.

- Seth esto es hermoso.

- Es menos de lo que mereces Alexa,- me tendió su mano- vamos, una rica cena nos espera.

Comenzamos a caminar por el muelle hasta llegar a la mesa donde Seth me sujeto silla para poder sentarme.

- Seth sabes que no soy mucho de las comidas elegantes y el vino.

- Y quien dijo que comeríamos elegante.

Se paró y fue a una cabaña que también era muy hermosa y cuando salió fue la cosa más hermosa que vi en mi vida, venía con dos meseros y en sus manos traían hamburguesas, nutella, chocolate, pizzas, refrescos de cola, gomitas.

- Esta es nuestra cena ¿te gusta?

- Que si me gusta, de hecho me encanta.

- Siempre sabré que no eres la típica chica que sueña con el príncipe azul, el castillo soñado, la cena perfecta, tu eres más que eso eres única y especial, no hay nadie como tú y nunca habrá una Alexa Collins igual en este mundo.

Le di un beso en los labios y luego comenzamos a comer y a conversar sobre la universidad.

La cena ya había terminado, Seth y yo caminábamos a la orilla de la playa.