Capítulo 7

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(T/N) se pregunto a si misma porque Kyle tenía cara de gato enojado, si el mismo se había ofrecido como voluntario para ir a buscar las piezas nuevas. El restaurante abría en unos veinte minutos, y eso era mas que suficiente como para que la chica lograra cambiar las partes necesarias del horno. 

Tommy se mantenía sentado a su lado, pasando las herramientas necesarias cada vez que ella las pedía. Era algo así como su asistente. Y Kyle los observaba cual águila a su presa. Mantenía la mirada fija en Tommy, quien desde su lugar, intentaba hacerse pequeño.

¡Solo estaba ayudando a (T/N)! 

Cuanto mas rápido terminara, mas rápido podrían abrir el restaurante y comenzar a trabajar. 

Kyle paseo sus ojos oscuros a las manos pequeñas de (T/N), las cuales se movían con velocidad y maestría impresionante. Manos que, al rato, se llenaron de manchas negras. Observo la forma en la que ella tomaba las herramientas, como acariciaba las piezas entre sus dedos y como la yema de la punta de ellos se paseaba sobre los bordes del horno. 

Aspiro hondo y salio de la cocina, con un cigarrillo entre sus manos.

Esa chica era veneno para el.

Veneno del bueno.

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Decidió tomar asiento en una de las mesas, el humo del cigarrillo lo rodeo con rapidez y varios de los empleados iban de un lado a otro, inseguros de que hacer. Les indico que de momento prepararan las cosas necesarias para cuando abrieran. 

Desde su lugar, vio un par de cabezas fuera del restaurante, esperando pacientes. Se imagino que serian clientes, así que de mala gana se levanto para explicares que el abrirían en un par de minutos. 

Al abrir la puerta, se sorprendió con chocar con unos conocidos ojos esmeraldas y cabellera rubia. Los mismos colores rosas y chillantes que la ultima vez.

Honey Lemon abrió los ojos, igual de sorprendida que el. Detrás de ella, había un tipo de piel oscura, alto y con rastas. A su lado el rubio de antes y la enana malhumorada de la otra vez. Casi se ahoga con el cigarrillo, casi. Mantuvo la postura y carraspeo.

—El restaurante aún no abrirá. Deberán esperar unos minutos mas. —la rubia hizo una mueca cuanto algo del humo salio de los labios de Kyle. Este lanzó el cigarrillo lejos, en un gesto que quizás significaba "Disculpa"

—Oh, eres el chico de la otra vez. ¿Kyle, verdad? ¡Choca esos cinco! —Fred coloco su puño delante del muchacho, pero este simplemente lo ignoro y volvió a entrar al restaurante.

Honey no le quito la mirada de encima. 

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—Listo, bebé. Ya estas mucho mejor. —(T/N) se levanto del suelo, con manchas negras en su rostro y manos. Limpio el sudor con un pañuelo que el pelirrojo le había ofrecido y con una sonrisa amable le agradeció. 

Se sentía animada.

Hace un tiempo que no tocaba piezas nuevas o mejor dicho, que no hacía algo que la hiciera feliz. Le indico a Tommy que lo encendiera y al instante, el aparato encendió, emitiendo calor. Recibió palmadas en la espalda y una que otra caricia en la cabeza a modo de agradecimiento. Hasta le prometieron cocinar algo para ella.

Con una sonrisa, salio de la cocina a buscar al idiota de Kyle para avisarle.

Y la sonrisa se le desvaneció cuando vio a Honey entrar al restaurante, sobre todo cuando la rubia jalo de la muñeca del muchacho, haciendo que este se girase. 

¿Tadashi? Mi nombre es Kyle.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora