All That Matters · Zayn Malik

Parte Siete » Russell Square.

viernes, 7 de julio. 17:30.

De: stephanieferdinand.rbp@royalbluepublishing.com.uk

Para: kassidycampbell5@icloud.com

Asunto: Saga Willow Black.

Señorita Campbell,

Me complace informarle que el grupo editorial Royal Blue Publishing ha decido comenzar a trabajar con usted en la edición, publicación y promoción de la saga de su autoría, «Willow Black», comenzando con el primer libro, «Código C.R.O.W.N.» en cuanto usted lo autorice.

Le invito a ponerse en contacto con nosotros para iniciar las negociaciones y los acuerdos legales pertinentes.

Afectuosos saludos,

Stephanie Ferdinand,

Editora en Jefe,

Royal Blue Publishing,

Londres, Reino Unido – 2017.

Dios Santo.

Estoy en la boda de Lyla Belanov, mi mejor amiga, siendo una de sus damas de honor junto a Theo, una chica llamada Verónica y su prima Carrie... Y me llega este correo diciendo que una de las editoriales más importantes de Europa, quiere publicar mi libro, quiere promocionarlo.

-Creo que voy a vomitar-digo, con mi celular en la mano-.

Apoyo mi espalda contra la puerta de madera de la habitación donde Theo y yo ayudábamos a Lyla a cambiar su vestido de novia, un Vera Wang magnífico, a pantalones blancos y una blusa de seda gris, porque está a punto de irse a su luna de miel en Aruba.

-Oye, ya me voy-dice, colocándose perfume-, y podrás salir de ese vestido-replica Lyla, riéndose, luce hermosa y mirándome a través del espejo-. Que por cierto, pensé que te gustaba.

-No-paso saliva y parpadeo-. Me gusta-creo que estoy en shock-. Es que... me contactó Stephanie Ferdinand.

Ellas me miran expectantes por unos segundos, pero dado que no respondo, ambas me preguntan:

-¿Y qué dijo?

Sacudo la cabeza, volviendo en mí.

-Dijo, que... ¡Que van a publicar mi libro!-exclamo y ellas sueltan gritos de emoción-.

-¡Oh, por Dios, Kassie!-me abraza Theodora-.

Lyla se nos une y tenemos un ridículo momento en el que las tres lloramos, nos decimos que nos queremos, que no sabríamos que hacer las unas sin las otras y agradecemos a la persona que desarrolló el maquillaje con aerógrafo y la máscara a prueba de agua.

Luego de nuestro desliz emocional, retocamos el maquillaje de la recién casada y salimos; Louis, su esposo, está esperándola, ya no con su esmoquin azul puesto, sino con una camisa blanca y jeans oscuros. Ambos tienen sonrisas igual de resplandecientes en sus rostros, lucen tan felices, están tan felices.

Theodora, las otras damas y yo, nos quedamos hasta que los invitados se van, aproximadamente a las seis de la tarde, los padres y tíos de Lyla nos dicen que podemos irnos, que ellos, la organizadora de la boda y su equipo terminarán lo que quede.

-¿Quieres que te lleve?-me pregunta Theo, cuando llegamos al vestíbulo del hotel, yo niego con la cabeza-.

-Andy va a pasar por mí-le recuerdo y por la mirada que me da, sé que está a cinco segundos de comenzar a decirme cómo no está de acuerdo con eso-. No te preocupes, todo está bien. Iremos a mi departamento y hablaremos de cosas que no tienen que ver con estar juntos de nuevo. Tranquila.