Cuarta parte: Lluvia

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-Buenos días- el arreglaba su corbata mientras yo intentaba abrir bien mis ojos

Él había despertado temprano solo para molestarme, y poder llamarme flojo, aunque lo era pero aun así me molestaba el que no había madrugado lo suficiente para verlo dormir o bien en realidad no pude madrugar por que me pase toda la noche viéndolo.

-¿Porque despiertas tan temprano?

-Para comenzar a prepararme para la escuela.

-Es muy temprano

-No, no lo es toma una ducha y cámbiate de una vez o llegaremos tarde.

-Que importa, no te dirán nada y a mi no me importa- talle mis ojos y me puse de pie

-Vamos, o me iré sin ti

-Que remedio - tome la dichosa ducha, me vestí y baje aunque sin tiempo para el desayuno

-Ya es tarde, ve comiendo esto -me dio un sándwich de mantequilla de maní y rodajas de manzana

-Esta bien, lo comeré- caminábamos a la escuela mientras yo "desayunaba"- ¿a que hora te levantaste?

-Cuando tu madre se fue al trabajo

-¿y que estuviste haciendo?

-Prepare mi mochila y tu mochila, tu almuerzo, mi almuerzo, tu "desayuno" mi desayuno

-¿y eso es lo que haces todos los días?

-Bueno, no preparo tu mochila

-Ya no dejare que hagas mi almuerzo

-No te preocupes, me gusta hacer eso.

-Rayos ¿y porque te esfuerzas tanto con la escuela? No lo necesitas

-Lo se pero se me hace injusto para los demás- era demasiado amable, y eso era bueno, no despreciaba los esfuerzos inútiles por superarlo de los estúpidos de la clase.

-¿Que importan esos idiotas?

-Demian, no deberías ser tan grosero con nuestros compañeros- me quede en una pieza cuando escuche mi nombre era una sensación increíble, a pesar de que solo me llamaba por mi nombre cuando se enojaba conmigo.

-Nathel -dije su nombre burlándome y el puso una mala cara - esta bien lo siento Nate

-Odio que digas así mi nombre

-Lo lamento

Llegamos por fin y nos dirigimos al salón donde el maestro puso mala cara al ver que llegaba con el tiempo justo, los maestros se molestaban con él por ser mi amigo aunque claro no hacia caso a eso, no les gustaba para nada que me hablara, pero siendo sinceros no se desharían de mi, necesitaban mis notas.
La escuela no representaba ningún reto mental, normalmente me quedaba dormido y me despertaban.

-No te duermas - me gritaba en voz baja

-No me importa

-Demian, por favor- y ahí era cuando tenia que despertar, no podía decirle que no

El timbre para el almuerzo se escucho y yo lo espere afuera mientras el profesor hablaba con él y como siempre salía con una cara de decepción por lo que le decían

-¿Lo mismo de siempre?

-Si, no se porque piensan cosas tan malas de ti

-Déjalos, no me importa lo que digan ¿Que hiciste de almorzar hoy?

-Pollo y verduras -dijo mientras sonreía y sostenía una caja bastante grande como para guardar mi almuerzo y el de el

-vayamos a comer a fuera ¿esta bien?

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⏰ Última actualización: May 08, 2016 ⏰

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