CAPÍTULO 17

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ALINA

Un precio.

Una vez más soy llevada al Olympia en donde me tienen limpiando la pista,mesas,habitaciones y demás.

Por suerte hoy me quitaron las cadenas ya que me impedían limpiar mas rapido y solo ando con la tobillera.

Y claro estoy sumamente vigilada aunque no es necesario,no voy a escapar si mi familia está en manos de la Bratva.

Cuando acepte venir aquí por mis hijos para protegerlos,sabía que las cosas serian duras, pero jamás creí que sufriría tal humillación.

Me pregunto si aún quedará algo del Viktor del que me enamoré? O realmente esa parte de el murió para siempre?

Mis lágrimas se derraman sin poder controlarlas y las dejo sin importarme si los matones de la Bratva me ven.

Me enfrente a un grupo de al rededor de 20 de los Mercenarios más peligrosos y salí victoriosa ¿pero ahora? Soy humillada por la Mafia Rusa y mi propio esposo.

Liam me dirige una mirada muy poco amable cada vez que me ve,me sonríe con tanta malicia que me da ganas de arrancarle los dientes.

Por lo que oi llego esta mañana a Rusia para hablar unos asuntos con su Jefe.
Y hablando de Viktor después de esa reunión se fue a San Petersburgo junto a Kostya por otros asuntos que claramente no quiso compartir conmigo.

Se fue dejándome en el Club acargo de Liam y eso me hace sentir nerviosa,esta claro que el rubio quiere asesinarme.

Así que trato de evitarlo lo más que pueda.

También intento no pensar en el hecho de que intente frotarme en la pierna de Viktor.
¡¿en que carajos estaba pensando?!

Debería generarme asco y repudio pensar en cosas como esas pero no puedo evitarlo,a pesar de que lo odie no puedo evitar lo que le hace sentir a mi cuerpo.

Lo deseo y eso me esta enfureciendo.

Tal vez solo este desarrollando el síndrome de Estocolmo,si de seguro debe ser eso.

Termino de limpiar la última plataforma de las zonas vips cuando siento que alguien se acerca por mi espalda,giro levemente mi cabeza sobre mi hombro para ver a una chica joven acercarse.

Me sonríe tímidamente y me giro por completo para quedarnos de frente,por sus facciones deduzco qué no debe ser mayor de 20 años,se ve muy joven y me hace acordar a Darcie.

Su cabello lo tiene teñido de rosa y la reconozco al instante.

Es la que estaba teniendo una sobredosis.

—Hola— me saluda tímidamente y una sensación de protección se despierta en mí.

Se ve tan inocente ¿como es que fue a parar aquí?

Le sonrío lo más calidamente que puedo saludándola —Hola.

—Quería agradecerte por lo que hiciste anoche,me salvaste la vida.

Juega nerviosamente con sus dedos y me acerco con cautela.
—No debes darme las gracias por eso,dime ¿estas bien?

Me da un asentimiento,miro hacia todas partes viendo que nadie nos este vigilando y la tomo de sus manos llevándola a una parte más oscura.

—Como te llamas?

—Annie.

—Como terminaste aquí?

Ella se encoge de hombros —No tenía dinero así que esta fue la salida más rapida que encontré.

—Que edad tienes?— inquiero.

Romanov #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora