Los dedos del Príncipe Heredero Fantasma eran pálidos, delgados, pero exudaban una aterradora sensación de poder, como si pudiera aplastar el alma en su mano con sólo apretar sus cinco dedos. Yuchi Rui exclamó: "¡Espera!"
"Ying Kai solía ser un dios; su alma no será destruida tan fácilmente por ti", Gong Wei no cayó en la trampa, manteniéndose firme y deteniéndose en seco. "¿Qué quieres exactamente?"
Las dos partes se enfrentaron en el cielo sobre la plataforma de jade blanco. La mirada del Príncipe Heredero Fantasma pasó por encima de Gong Wei y Xu Shuangtze, directa a la espalda donde Yuchi Rui estaba de pie, fijando su mirada en el pecho de su uniforme de la Escuela Yejinmen.
Su rostro, antaño pálido y apuesto, perdió finalmente por completo la sonrisa, y sus ojos se volvieron fríos y profundos. "Dame el alma de Xuan Jinghe."
El frasco que almacenaba el alma estaba oculto en sus ropas. Yuchi Rui instintivamente dio un paso atrás.
Gong Wei no dudó. #¡Sigue soñando!"
"¿No lo das?" El Príncipe Heredero Fantasma levantó su mano, sosteniendo el alma de Ying Kai frente a él. La luz fantasmal se reflejaba en sus ojos estrechos. "Quieres sellarme en el Reino del Caos. Si llevo allí también el alma de Ying Chenyuan, ¿qué crees que pasará?"
Instantáneamente, las expresiones de todos cambiaron.
"Me sellas por cuánto tiempo, Ying Chenyuan se queda en el Reino del Caos por cuánto tiempo. Me sellas hasta que los cielos se derrumben, Ying Chenyuan nunca será capaz de reencarnarse... dime, ¿en qué se diferencia esto de la aniquilación?"
Yuchi Rui desenvainó furiosamente su espada. "¡Qu Xie!"
Gong Wei le detuvo con una mano, susurrando enfadado: "¡No te dejes provocar por él!"
"Puede que Ying Chenyuan y Xuan Jinghe tengan la misma importancia para ti, pero ¿qué pasa con ellos?". La mirada del Príncipe Heredero Fantasma iba y venía entre Xu Shuangtze y Yuchi Rui, una curva fría se formó en la comisura de su boca. "Uno es tu compañero de nueve mil años, el otro es tu mentor y hermano. ¿Puedes soportar que Ying Chenyuan sea suprimido permanentemente?"
"..."
Los ojos de Xu Shuangtze eran fríos, y las venas de la mano de Yuchi Rui que sostenía la espada se abultaron.
"Si quieres recuperar a Ying Chenyuan, usa a Xuan Jinghe como moneda de cambio". El Príncipe Heredero Fantasma levantó la barbilla con indiferencia. "Sólo quiero que el Maestro vuelva a mi lado."
Xu Shuangtze finalmente se movió, girando ligeramente la cabeza y preguntando en voz baja: "¿Y Xuan Jinghe?"
La mano de Yuchi Rui tembló ligeramente mientras sacaba la botella de almacenamiento de almas de su cuello. La botella medía menos de cinco centímetros, estaba atada con un cordón de cuero y colgaba de su cuello.
Desde la destrucción del cuerpo divino del Príncipe Heredero Fantasma, nadie había estado suministrando poder divino al cuerpo de Xuan Jinghe en la reserva de sangre, por lo que su alma ya se había debilitado hasta cierto punto. Su figura translúcida se había vuelto muy pequeña, acurrucada con los ojos cerrados contra la pared de la botella.
Xu Shuangtze extendió la mano. "Dámelo."
Gong Wei se giró de repente. "¡¿Xu Bai?!"
Entonces vio a Xu Shuangtze mirándole en silencio, sin decir una palabra, sólo moviendo ligeramente la cabeza.
En un abrir y cerrar de ojos, Gong Wei comprendió lo que estaba pasando, su corazón se llenó de una ligera sospecha y su mano que sostenía la espada se congeló en el aire.
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La Espada Nombrada 'Sin Salida'
RandomCuenta la leyenda que el hombre más formidable del mundo, Xu Shuangtze, poseía un apreciado retrato de su difunta esposa. Pero nadie sabía que, en su reverso, había otro retrato de su archienemigo, al que Xu Shuangtze había matado con sus propias ma...