𝐁𝘭𝘶𝘦 𝐄𝘺𝘦𝘴 || Radioapple ||

𝐗𝐗𝐕𝐈𝐈𝐈

Ambos fueron a casa y llevaron a Charlie a su cuarto. Ese día dormiría con nosotros. Fue tanto el no querer separarme del rubio que termine acostado en sus piernas, mientras apoyaba la cabeza y los brazos en su regazo. Lucifer quedó dormido sentado.

Aunque no pude dormir esa noche. Me sentía tan aliviado que hasta se me iba el sueño. Todo el estrés, dolor de cabeza, culpa se habían ido y mi sonrisa volvió a formarse poco a poco.

Ya estaba amaneciendo, pero no me quería mover de mi lugar. Estaba bastante cómodo y quería estar al lado del rubio lo más posible. No pasó mucho tiempo para que el Moreno quedé completamente dormido.

Mi sueño fue interrumpido por un rayo del Sol que se hizo visible en ambos rostros. Lucifer y yo despertamos y miramos el amanecer por unos segundos. Me puse de pie y acaricié los mechones del más bajo. Amaba su pelo y sus ojos también, sus pelos tam suaves y hermosos que no me cansaría de acariciar.

-"Buenos días, Al."- Saludó Lucifer adormecido. -"Buenos días, Lu. ¿Como te encuentras?"- Le pregunté y ordené la cama para que este se acostara y esté tranquilo. -"Sabes, mi madre y su esposo estaban muy preocupados por ti"- Lucifer formó una pequeña sonrisa con sus labios al escuchar eso. Por primera vez sentía la preocupación de otras personas por el. -"¿Por qué le dices a tu padre "su esposo"?"- Preguntó con duda.

-"Bueno, porque no es mi padre biológico. Hace mucho tiempo mi padre abandonó a mi madre y a mí, pero aún así lo nombró "padre", algunas veces, porque me trato como a su propio hijo."- Expliqué con una sonrisa y con el recuerdo de todo lo que había explicado. -"En fin, iré a preparar el desayuno."- En eso me fuí y me dirigí a la cocina.

Debía hacer que Lucifer se sienta bien y que nada malo paso. Eso por algunos meses, aún así tenía un constante miedo de que algo malo pasé.

Pasaron meses y poco se poco Lucifer iba sintiéndose mejor, el médico menciono que dentro de un mes ya estaría perfectamente mejor, por lo tanto eso alegró a ambos.

-"¿Un viaje?"- Preguntó Lucifer. -"Si, el médico dijo que ya estabas bien, así que podríamos irnos de viaje a algún lugar con Charlie."- afirmé mirando a Lucifer a los ojos. Amaba sus preciosos ojos azules, tanto, que podría abrir sus párpados mientras duerme y sacarle una foto. -"Esta bien.. Me encarga-"- El rubio fue interrumpido por mi. -"No te hagas problema, querido. Ya organicé todo, la semana que viene iremos de viaje."- Ambos nos dedicamos una sonrisa, provocando que esta sea más larga cuando Charlie apareció.

-"papa quiedo der la tele"- a pesar del error común de la niña al confundir la 'r' y la 'b', para los oidos de ambos se escuchaba perfectamente, y su voz para nosotros era una melodía.

preparamos las maletas para el viaje, guardabamos todas sus prendas y cosas en la valija y armaban pequeños bolsos con otros objetos que podrían necesitar como los juguetes de Charlie.