Devon
Sin saber cómo y en qué momento había pasado tan rápido mi fin de semana ya era domingo por la tarde, mi cabeza solo estaba centrada en una cosa o en una persona, Noah.
Necesitaba hablar con alguien sobre esto, alguien que no me dijera que estaba loco.
Normalmente los fines de semana, como si una ley lo marcará debía ir a casa de mi padres, allí es donde estaba, sentado en un pequeño sillón que estaba en el jardín mirando el atardecer, era bonito, últimamente veía las cosas más bonitas, me sentía raro.
—¿En qué piensas mi niño?— el asiento de al lado se hundió y unas feromonas dulces inundaron mi sentidos, seguí viendo el atardecer estaba acompañado de mamá.
—Podré tener 50 años y tú seguirás diciéndome niño— comente con gracia sacándole una sonrisa.
—Siempre serás mi bebé.—jalo mi oreja tan fuertemente haciéndome soltar un quejido— Siempre ¿Entendiste?
—Entendido capitán.— tuve el impulso de recostarme en sus piernas tal y como lo hacía cuando era niño.
—¿Vas a contarme qué te pasa? Últimamente te noto diferente, tienes una vibra diferente.
Suspire pesadamente en sus piernas, acomode mis pensamientos antes de hablar y decir una tontería: —¿Te puede gustar alguien en poco tiempo?
Su rostro se tornó en confusión y asombro, pero antes de poder decir algo continue.
—Suena tonto, tal vez es una estupidez mía.
—¡Claro que no! Para el amor no existe el tiempo.
—Lo dices porque tú y papá se enamoraron a los 3 meses de conocerse. —señalé cerrando los ojos.
—Devon, yo me enamore de tu papá desde que me arrojó ese balde de agua.
Me levanté de sus piernas sentándome recto y cruzando los brazos.
—Pero yo no puedo arrojar un balde de agua. —calle un momento pensando en lo sincero que estaba en ese momento.
—¿Es diferente? Hablo de lo que sientes... ¿Es diferente a los que sentías por Juliette?
Mordí mi labio inferior pensando en lo distinto que era.
—Es muy diferente, es mucho más intenso... como si mi corazón quisiera salirse de mi pecho—me recosté sobre mi brazo suspirando pesadamente.
—¡Hassan! ¡Te llama tu papá!— mi padre gritó desde la puerta corrediza que daba a la casa, mientras comía una galleta que había traído— ¡Ven rápido, está furiosos!
—Ese viejo— hice una mueca de disgusto y se puso de pie soltando un suspiro pesado— El tiempo te dará las respuestas que necesitas, date tu tiempo y dale su tiempo... encajan a la perfección.
Susurro lo último siendo inaudible para mí, me limite a preguntar ya que se había ido de mi campo visión.
—Tendré que hacerle saber que me gusta entonces—dije para mi mismo mirando al cielo que pintaba un lindo atardecer— Espero y no te enojes.
Noah.
Otro día y otro lunes más, desperté con Sua durmiendo enredado en la cobija en una esquina de la cama tal cual araña de pared, estaba en su último año de preescolar por lo que pronto sería un niño grande yendo a la primaria. Al ser de preescolar entraba un poco más tarde, antes podía llevarlo yo mismo pero ahora Avery o Dante se encargaban de esa tarea, aunque eso me entristeciera un poco.

ESTÁS LEYENDO
La Inmensidad De El Mar (𝗢𝗺𝗲𝗴𝗮𝘃𝗲𝗿𝘀𝗲)
RomanceTras años de maltratos por el que se supone que seria su compañero de vida, Nun Sun huye de su país de origen y de un alfa manipulador junto con su pequeño, llegando a un puerto donde comenzara una vida nueva, lleno de miedos y temores, también don...