27

30 9 1
                                    

── who are we to judge them?
who are they to judge us?─────

·                                       ·                              ·

✦         .            *            ˚                     ✦

·                   ·             ·

✦               .            *            ˚                                ✦













Las nubes grises se habían adueñado del paisaje de aquel día, como si pudiera sentir toda aquella tristeza y dolor de las personas reunidas vestidas de negro con lagrimas desbordando por sus ojos. Así era el destino todos. A algunos les llegaba mas temprano, a otros mas tarde. A fin de cuentas, nadie podría escapar de las manos de la muerte.

Raramente, había sido el turno de Moon Taeil. Ni con todas las riquezas, ni todo el dinero, ni todos los casinos de la Ciudad habían sido suficiente para que no le tocara su destino. A través de aquel cristal, se podía ver su rostro, pálido, hinchado, descansando en un sueño del que más nunca despertaría. Su familia lloraba, sus amigos derramaban lagrimas. Pero alguien en particular, no parecía tener ni un poco de sensibilidad.

Jeong Jaehyun fumaba un cigarro. Llevaba unos lentes de sol negros, junto con un traje del mismo color. Su abrigo negro se arrastraba casi que hasta sus rodillas. Miraba el ataúd como si de una persona desconocida se tratase, sin un gesto, sin una mueca, sin algún indicio de que la muerte de Taeil le dolía, pese a que se conocían desde hace años.

Pero, ¿Qué había pasado realmente? Se preguntaba Meng Huiyin, allí entre la multitud, con un abrigo negro que le daba un poco de calidez ante el frío que congelaba los huesos.

¿Qué había pasado anoche?







— ¿Estás seguro? — Las frías baldosas del hospital resonaban bajo sus pies, un sonido que con cada paso que avanzaba, los hacía sentir más presionados, como un eco macabro en la serena atmósfera de la unidad de cuidados intensivos.

— No empieces, Taeyong. — Respondió de malhumor.

— Piensa bien lo que haces.

— Lo he pensado bien, ¿tú no? — Jaehyun lo volteó a mirar. En aquella penumbra, Jaehyun y Taeyong, disfrazados de enfermeros, se dirigieron a la ultima puerta del pasillo de la unidad de cuidados intensivos.

Taeyong asintió con su cabeza. — Pero nos podemos meter en más problemas.

— ¿Eso te importa? — Jaehyun levantó una ceja.

— Umm... — Taeyong hizo una mueca, llevando su dedo a su barbilla. — ¿Desde cuando tienes esto planeado, Jeong?

Jaehyun soltó una risa.

— Hace mucho.

Al abrir la puerta, la única luz que iluminaba aquella tétrica habitación, era la luz que provenía de la maquina que mantenía a raya la vida del susodicho: Moon Taeil.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 04 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

the blue scorpion ── jaehyunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora