Las 3 Princesas: Una Noche Especial.

La Noche Especial

Un día antes del cumpleaños número veintiuno de las princesas, ellas decidieron salir a celebrar su cumpleaños a diferentes partes del mundo, la hija más grande decidió irse a Sudamérica con Irene y Amelia, dos de sus mejores amigas, ambas princesas, cada una de un reino muy cercano al reino inglés. Carmina, un poco más rebelde y liberal, quiso irse con sus mejores amigos, un grupo pequeño para tratarse de una de las mujeres más importantes del mundo, un grupo reducido solamente a cinco personas: David; el novio de la princesa, Amanda su mejor amiga, Tatiana; su compañera de travesuras de toda la vida, y por último Manuel y Alejando; la pareja homosexual favorita de la princesa. Víctor, el novio de Catalina, la convenció y ellos se prepararon para irse a un romántico viaje a Japón. Una vez organizados los planes para las diferentes celebraciones de su cumpleaños número veintiuno, las tres hermanas junto a sus amigos, familiares y conocidos más cercanos se juntaron para compartir una cena en el honor al cumpleaños de las monarcas y donde se coronarían a las tres hijas como reinas legítimas. La celebración se dio en uno de los salones más imponentes del palacio, inaugurado por la reina Victoria y donde organizó las más majestuosas fiestas del siglo XIX. Las tres hermanas asistieron usando vestidos de los mejores diseñadores del momento, la hermana más pequeña, la delicada Catalina se presentó a la gala con un vestido de , en color rosa crema y con una amplia falda que resultó ser un obstáculo para la princesa ya que al subir los escalones hacia la entrada del palacio y con los nervios, su vestido provocó un accidente, pues su zapatilla se enredó con la falda y la hermosa rubia terminó rodando por los escalones, accidente en el que, por suerte no pasó nada grave. La excéntrica Carmina desfiló en la cena con una creación de la majestuosa marca Robert Cavalli, el vestido blanco de manga larga hecho de una transparencia adornada con encajes y una larga cola de plumas causó sensación entre los presentes, ya que era la primera vez que una princesa vestía de forma tal 'vulgar'' ó así fue llamada por The Sun, el diario más importante del reino. Por último, la mayor de las hermanas: Cornelia, sorprendido a todos con su elegancia y glamour al llegar con un vestido, donde del pecho a la cintura era ajustado y después caía una falda larga asimétrica en color dorado del diseñador Bottega Veneta, el cual tenía un valor exagerado, el cual llegaba casi al millón de euros. El trío de hermanas junto a sus invitados, pasaron una de las veladas más imponentes del siglo, una noche donde lo único que importó fue celebrar y desear larga vida a las hermosas princesas. La fiesta era perfecta, una de las fiestas más esperadas del momento, una fiesta realizada en un imponente lugar, miles de euros en arreglos florales, donde el lujo y la ostentación se unieron en una romántica y divertida fiesta, llena de sentimientos creados gracias a la entrada que hicieron, la radiante Cornelia, la exuberante Carmina y la perfecta Catalina, llegando del brazo de su padre el rey y donde nada de clásicas melodías de bienvenida se tocaron, ya que en su camino al salón el tenor italiano Andrea Bocelli, junto a un blanco piano fue el encargado de poner banda sonora al gran momento interpretando muchas de las canciones que caracterizan al artista. Al final del salón, llegando y frente a un impresionante muro de flores muy acorde con el resto de la decoración, que incluía adornos encargados a una de las florerías más antiguas y prestigiosas de Europa, ubicada en Florencia, a un lado de todos esos arreglos, las estaba esperando en primera fila, la madre de las próximas reinas y junto a ella, sus amigos, que al igual que el resto de los invitados, estallaron en alegría y aplausos con el romántico baile que protagonizaron las festejadas con sus actuales novios; David; él de la princesa Carmina, Víctor, el novio de Catalina y Andrés, la pareja de Cornelia, donde los pasos de baile se juntaron con la tensión de la fiesta, que se hizo palpable desde el primer momento, al parecer, especialmente en el padre. "Era divertido ver lo nervioso que estaba el rey", contó a la revista People un invitado. "Claramente era consciente de la importancia de lo que estaba a punto de suceder. Esa misma mañana era todo sonrisas pero, según se acercaba el momento, se podía ver los nervios del esperado anuncio del rey". No es para menos: esta era la primera vez que un rey le daría la misma corona a tres próximas reinas, sin embargo, la elección si pudo considerarse un éxito, y sí lo fue, la ceremonia de su proclamación, pero en la noche de la víspera del cumpleaños de las trillizas, de la que se creó una memorable fiesta en el castillo, iluminado con luces rojas en todo su perímetro. La familia real ha ofrecido a sus invitados un banquete tradicional ingles pero con un toque innovador, como la misma fiesta, un menú que incluía pollo, salmón, filetes y helado de fresa, donde el banquete culminó con una tarta especial de tres pisos con glaseado blanco y capas de fruta, todo ello acompañado con champán para degustar las delicias de los paladares más exigentes. Después de la cena, y donde no se hicieron esperar las actuaciones en directo de estrellas de la canción; desde la gran voz de Adele quien compartió escenario con Lady Gaga, hasta la magnífica actuación de Rihanna, Marron 5 y donde John Legend se encargó de poner en pie a los invitados interpretando algunos de sus grandes éxitos, esa magnífica noche se creó por primera vez un reino hecho por tres mujeres que con valentía, honor y responsabilidad, llevaron a la cúspide de la gloria el reino, gobernándolo durante más de 50 años y del cual sobresalen descendientes que actualmente viven en Francia, Alemania, las ciudades de Venecia y Milán , Rumania y en Gran Bretaña; Inglaterra , Gales y Escocia.