El novio de mi hermana.

Capítulo Veintiséis: Esto no debía terminar así.

Luke.

Kylie me miraba esperando una respuesta.

Estaba seguro de que debía dársela pero yo estaba de verdad nervioso.

Digo, ¿cómo decirle sobre lo que siento si ni siquiera sé como va a reaccionar?

Esto da miedo.
Pero según los mensajes que nos habíamos mandado entre Dylan y yo, no habría problema al decírselo.

Pero, maldita sea, qué vergüenza.

Me limpié la garganta.
- Eh, mira, la verdad es que, es difícil decirlo y yo estoy muy nervioso.

Ella asintió con una sonrisa en su rostro.

Dios, tenía que decirlo.
Ahora mismo.

Pero entonces se me ocurrió otra idea.

Di unos pasos hacia ella hasta que yo ya estaba dentro de su casa y con una mano la tomé de la cintura con lentitud.

La otra mano la dejé en una de sus mejillas arreboladas.

Espero poder decirle todo con un beso, sólo con un beso.

Acerqué mi cabeza a la de ella y nuestras narices chocaron mientras nuestros labios buscaban la manera de colisionar.

Esta vez era grande.
Finalmente iba decirle lo que sentía. Finalmente.

Estábamos tan cerca.
Yo estaba muy cerca de sentir nuevamente esos deliciosos labios que tanto anhelaba. De verdad estaba cerca.

- ¡Luke!

Y después, todo se fue al caño en un segundo.

Kylie se separó nerviosa de mí, dio unos pasos atrás y miró a Chelsea venir hacia mí.

Dios mío no.
No más Chelsea, por favor.

Reflexioné acerca de lo que pasaba por mi mente y corazón. La dueña de mis pensamientos no era Chelsea y mucho menos era ella quien gobernaba mi órgano bombea sangre.

La dueña de todo eso era, desde hace tiempo atrás, nada menos que Kylie.

Y fue por eso que le conté a Dylan y me decidí venir a declararme.

Pero yo no contaba con que Chelsea viniera a abrazarme. Digo, ¿por qué? Pensé que me odiaba.

Miré a Kylie por encima de su hermana.

Ella me sonrió triste y se dio la vuelta creyendo que todo era broma.

《 ¡No, Kylie! Se supone que tú y yo debíamos de estar juntos 》

- Hola, Chelsea - sonreí - ¿Qué pasa?

Quise separarme pero su agarre no me lo permitió.

- Lo siento, Luke - sollozó - Kylie me lo contó todo, lamento haberte culpado.

Mordí mi labio superior.
Oh diablos, yo no había planeado eso.

Correspondí ligeramente su abrazo. Todavía no sabía de qué modo reaccionar.

Dylan abrió los ojos molesto y me arrojó pirañas hambrientas con la mirada.

Tragué saliva e intenté encogerme de hombros.

Murmuré un:
> No es mi culpa - sin decirlo realmente pero no creí que me hubiera entendido.

Finalmente Chelsea me soltó.
Me miró con ojos llorosos.

Ay madre.
¿Yo le había hecho eso? Maldita sea, me siento pésimo.

- Chels... - murmuré confundido.

- Es un detalle tan bello que hayas venido a decírmelo en persona - suspiró.

Eh, sí.
Digamos que he venido por ti y no por tu hermosa y sexy hermana de la que estoy enamorado desde que soy adolescente.

- Eh... - me detuve. No iba decírselo así como así. No después de ver como la dejé con el asunto de Morgan.

Ella se puso tensa.
Las comisuras de sus labios bajaron poco a poco.
- ¿Acaso no has venido por mí?

Dejé de respirar.
Maldición, ¿como podré salir de esto?

- Lo hizo - dijo Dylan detrás de ella - pero también vino por mí.

Chelsea frunció el ceño, Iris y Kylie todavía más.

Dylan se acercó a nosotros, pasó un brazo por mis hombros e intentó actuar natural.

- Somos amigos. De hecho íbamos a salir y dijo que de paso, vendría a dar explicaciones.

Chelsea sonrió y asintió.
- ¡Eres un amor, Lukey! Podemos volver a ser novios ahora.

Me puse completamente rígido.
Oh no, por favor no.

Esto era cada vez más incómodo. Estoy metido en un lío.

- No tenía intenciones de volver contigo, Chelsea - salió de mi boca así como así.

Ella se tensó.
Me miró con ojos abiertos y expresión vacía.

Maldición.
¿Por qué no lo pensé más?

- ¿Qué? - dijo todavía en shock - ¿Por qué?

Respiré hondo.
Me armé de valor.

《Porque, estoy loco por tu hermana 》

- Porque... - no me permitieron seguir.

Unos brazos me rodearon el cuello y unos labios se pegaron a mi mejilla.

Esos labios repulsivos y nada atractivos.

- Porque está conmigo ahora, nena - sonrió Hayley.

Todos se quedaron helados.
Dylan se alejó de mí poco a poco.

Chelsea parecía tener un tic nervioso mientras Iris y Kylie dejaban de respirar.

No no.
¡Esto no debía salir de este modo!

- Lo siento chica, lo perdiste - sonrió con maldad la chica Morgan.

Normalmente no tengo pensamientos satánicos ni nada por el estilo, pero, si esta chica sigue andando por el entierro sin vela, me las arreglaré para que le pase algo.

Miré a Kylie.
Un sentimiento de satisfacción se esparció en mi interior.

Claro, me libraré de la chica Morgan, siempre y cuando Kylie no lo haga primero por mí.

- A ti nadie te ha invitado a esta conversación, Morgan. Ándate al prostíbulo de donde has venido y no te metas donde clientes frecuentes no te han solicitado.

Se desató el caos y una peculiar atracción en mi persona.

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N/A:
Sí, ya sé que las estoy matando de ansiedad, pero, diablos, ¡me encanta hacerlo! :3

Pronto subo el próximo :) una vez hecho, estará por aquí *esta vez va en serio*

PD: ¡Feliz cumple, Mely! <3 te adoro, cuídate. 

Besos,
Erika :)