extra (1)

14 1 0
                                    


—Solo es una carta — dijo Luna, sosteniendo el sobre con curiosidad.

—¿Y qué dice? "Hola Luna, hoy mi padre es más rico y yo soy más guapo, salgamos" — Leo puso voz exagerada, agitando una mano en el aire con dramatismo.

Luna le dio un manotazo en el brazo.

—¡Oye! Déjame ver si estoy entendiendo… —

—Déjame ver si sí — interrumpió Leo, con una sonrisa burlona.

Luna suspiró.

—¿Porque tú y yo andamos no puedo tener amigos?

—Sí puedes, de los feos. No de uno que te manda mil mensajes al día — respondió Leo, cruzándose de brazos.

Desde detrás de un arbusto cercano, Percy frunció el ceño.

—¿Chicos, creen que deberíamos intervenir? — preguntó en voz baja.

—Shhh, deja que hablen — respondió Jason, pasándole el recipiente de palomitas de maíz sin despegar la vista del drama.

Luna, ignorando a su audiencia secreta, giró hacia Nico.

—Oye, Nico, ven aquí. Si fueras mi novio…

Nico parpadeó.

—Qué gran inicio de pregunta — murmuró con resignación.

—¿A ti te molestaría que fuera amiga de Evan de la cabaña de Afrodita? — preguntó Luna.

—¿Qué importa lo que él crea? — se metió Leo, rodando los ojos.

—Esa idea no me agradaría — admitió Nico, encogiéndose de hombros.

Leo lo miró fijamente.

—¡Claro que importa lo que él crea!

—¡Ajá! ¡Sabía que ibas a decir eso! — exclamó Leo, apuntándola con el dedo. — Pero cuando yo digo que Evan es un modelo de revista con un ego del tamaño del Olimpo, entonces no importa.

—No es un modelo de revista — protestó Luna.

—Luna, literalmente firmó autógrafos después del último torneo de captura la bandera — dijo Nico.

—Eso fue un malentendido…

—Le dio su número a ocho chicas y a un sátiro — añadió Jason, aún masticando palomitas.

Luna suspiró.

—De acuerdo, tal vez no es el mejor candidato para amistad.

—¡Ja! Punto para Leo — exclamó Leo, alzando los brazos en victoria.

Percy miró a Jason.

—Bueno, creo que ya podemos salir del arbusto.

—Ni loco, quiero ver si esto termina en pelea o en un beso.

—¡Jason! — exclamó Nico, indignado.

—¿Qué? ¿Ustedes no tienen apuestas?

—No todavía — murmuró Percy, sacando unas monedas.

Luna y Leo se voltearon al mismo tiempo.

—¡Sabíamos que estaban ahí!

Jason solo les lanzó una palomita.

—Continúen, estamos disfrutando el show.

---

¡NO HABLO INGLES!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora