1 - ¿Arrepentimiento?

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¿Menos de 3 semanas y aún ni una gota de arrepentimiento? Era casi imposible, aunque ya me había tardado bastante. La palabra en sí significa cambiar de opinión acerca de un pensamiento o hecho inicial; cosa que todos mis compañeros de intercambio habían experimentado, todos menos yo.

"La experiencia de irse de intercambio es inigualable, única, entretenida. Es LA oportunidad en la vida así que aprovéchala al máximo..." así y varias otras cosas dicen los que ya se han ido de intercambio.

¿Acaso nadie cuenta sobre lo que sintieron ANTES de irse?
¿El miedo de llegar y no tener idea sobre QUÉ hacer? ¿El miedo a no llevarse bien con su familia? ¿A no hacer amigos? ¿A estar solo? ¿Darte a entender en otro idioma? ¿Cómo hago para comprar unas pastillas para la cabeza si no tengo idea de cómo, o por último dónde conseguirlas? (sin contar que no tengo idea de cómo se llaman en aquel lugar.) Dudas hay por montones, pero no son dudas las que necesitamos sino respuestas.

Explicaciones. Testimonios. Evidencia.

Eso es lo que necesitamos; o que al menos yo necesito. Personas que me expliquen qué es lo que sucederá, qué necesitaré, por qué etapas emocionales pasaré y cosas que necesitaré pero nadie se atreve a decirte porque hay ciertas cosas que, por lo menos en mi cultura, son denominadas tabú.

Reflexión.

Justo lo que estaba tratando de evitar hacer en estos últimos 4 meses, que por cierto, se han vuelto intensos. Evadiendo momentos a solas, llenando mis -ya limitados- tiempos libres con más cosas por hacer, y así. Todo con tal de no pensar en las posibles cosas que podrían o no ocurrir.

A algunos apenas les llegó el mail confirmándolos en su país de destino, y les entró la desesperación, arrepentimiento, locura y muchos otros adjetivos de detonación negativa.
A otros cuando se les informó quienes serían la familia que los acogerá en su país anfitrión les llegó el temido escalofrío: cargado de dudas, temores, expectativas, ansiedad y arrepentimiento.
Y a unos pocos (incluyéndome dentro de estos) a unas pocas semanas antes de irse y dejar todo atrás.

Supongo que este es el más ligero de las 3 categorías que hay, porque de por si llevas menos tiempo pensando en lo arrepentido e inseguro que estás sobre una decisión que tomaste hace 1 año aproximadamente, pero a su vez tienes menos tiempo para hablar y resolver ciertos temas. A menos de 1 mes de partida, recién ponerse las pilas y pensar en:
¿Qué llevarás?
¿Qué dejarás aquí?
¿En qué cantidad lo llevarás?
¿Será suficiente?
¿Estaré exagerando?
¿Puedo comprarlo allá?
¿Cuánto tiempo puedo sobrevivir sin tener esto?

Cosa que los niños de las otras categorías llevan más tiempo pensándolo, y por lo tanto, tienen estos temas un poco más resueltos.

Que bueno que entre nosotros nos compartimos datos y consejos.

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