-Capítulo 13-

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escuchen esto mientras leen
https://youtu.be/MrL7NiiQTHI , nothing like us JB

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Estaba dormida pero sentía unos dedos acariciando suavemente mi rostro, abrí mis ojos muy despacio y me sorprendí al no ver a nadie en la habitación, la luz estaba apagada y aún así el lugar se encontraba iluminado por la luz de la luna que se filtraba por la ventana, cerré mis ojos al momento que sentí una fría brisa entrar por la misma, pero al momento de abrirlos me sobresalte de inmediato. El estaba allí parado observandome. El mismo chico misterioso del bosque, ¿Qué hacía aquí?, ¿Como logró entrar?. Se acercó a mi, causando que mi corazón latiera cada vez más rápido, su mirada era tan hermosa y sombría a la vez.

–¿Que haces aquí?– me aproxime a decir.

–Vine a ver cómo estabas– su voz me hipnotizo.

–¿Como supiste lo del accidente?– pregunté .

–Simplemente lo sé, y ya que e visto que estás bien debo irme– se giró con dirección a la puerta pero yo fui mas rápida y lo tomé por el brazo. No iba a permitir que se fuera, no después que duré tantas horas pensando en la manera de volverlo a ver.

–No te vallas– susurre y observé como giraba su rostro hacia mi.

¿Porqué quieres que me quede?– también susurró.

–No lo sé, sólo siento la necesidad de que lo hagas– en ese momento alze la vista y nuestras miradas se cruzaron, observé un brillo en sus ojos y sentí como si miles de mariposas revoloteaban dentro de mi. No se que demonios me sucedía en ese momento.

El se sentó en una pequeña silla situada a un lado de mi camilla.

–¿Puedo hacerte una pregunta?– solte y una pequeña sonrisa curvo sus labios.

–Preguntas demasiado, ¿lo sabias?– dijo con un tono divertido.

–Prometo que será la última– sonreí y el asintió. –¿Cual es tu nombre?– pregunté, la verdad es que tenía mucha curiosidad por saberlo. El chico meditó un momento pero luego se decidió.

–Justin, me llamo Justin–

Asentí grabando su nombre en mi mente

–Yo soy...–

–_____, lo sé– me interrumpió.

–¿Cómo lo sabes?– pregunté.

–Dijistes que no más preguntas– contestó humedeciendo sus labios.

–Esta bien– suspiré frustrada.

Su mano estaba sobre la camilla, acerqué la mía a la de el pero me di cuenta que mi mano tenía una aguja intravenosa, o (jelco) donde me suministraban el tratamiento, el se dio cuenta y bajó su mirada a nuestras manos y las entrelazo pero solo un poco para no hacerme daño. Sonrió y se quedó observandome detenidamente, como queriendo hacer algo hasta que se levantó de la silla y se acercó a mi, su rostro estaba muy cercano al mio, su mirada pasó de mis ojos a mis labios y viceversa, se veía algo desesperado pero luego un atisbo de arrepentimiento llegó a el, así que símplemente besó mi frente y se apresuró a hablar.

–Lo siento _____, pero debo irme– susurró y se alejó de mi.

–¿Volveré a verte?– pregunté observando como se alejaba.

Detuvo su caminar y sin siquiera voltear a verme lo único que escuché decir de su parte fue un "no lo sé", luego de eso salió por la puerta dejándome sola y muy conmocionada.

A los minutos escuché la puerta abrirse y la esperanza de que fuera Justin llegó a mi, pero desapareció cuándo vi a Matt acercarce a mí con una bolsa de papas fritas en sus manos.

–¿Despertaste bella durmiente?– sonrió acercando la bolsa a mí, a lo que negué con la cabeza, no quería comer nada.

–¿Como te sientes?, ¿te sigue doliendo el pié?– preguntó sentándose en la silla que había sido ocupada por Justin minutos atrás.

–Si, aun me duele pero no tanto como antes, por cierto, que hora es?– pregunté frunciendo un poco el ceño.

–Las 2 de la madrugada– respondió muy tranquilo, yo abrí los ojos como platos.

–¿Y porque estás aquí?, se supone que deberías estar dormido en la casa y mi padre se tendría que haber quedado acá conmigo–

–inicialmente nos íbamos a quedar tu padre y yo contigo aquí en el hospital pero la enfermera dijo que sólo podía ser un acompañante por habitación así que yo me ofrecí y tu padre accedió– alzo los hombros. –fin de la discusión–

–ok ya entendí– bosteze. –Primo tengo sueño voy a dormir– me arrope cómo pude, aún sentía dolor.

–No me sorprende– soltó Matt riendo. –Te la pasas dormida–

–Ya callate, son las dos de la madrugada, deberías hacer lo mismo, además a mí me están suministrando calmantes para el dolor que me dan sueño– respondí entre risas.

–Si si como sea, duérmete– sonrió, y cerré mis ojos.

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Aww que leendooss.

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The Enchanted Forest  (Justin Bieber y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora