La puerta se abrió lentamente dejándome ver los zapatos de aquella persona, unas converse negras y blancas.
Levanté la vista poco a poco para subir por un pantalón vaquero una camiseta blanca hasta toparme con una sonrisa del mismo color doblada, una nariz perfecta, unos ojos azul agua que parecían verdes, una ceja arqueada y la otra agachada en un gesto de extrañanza y un pelo rubio oscuro, ondulado que serpenteaba hacia arriba ondulandole el pelo entero.-Hola- Dijo con una voz cálida y Juvenil aquel chico.
Me levanté lentamente sin dejar de mirarle a los ojos desde detras de mi flequillo con los mios.
-Ho-Hola-
-¿Que haces aquí? - Dijo sonriente como si mi presencia en vez de molestarle le gustara... aunque a nadie le gustara mi simple presencia.
-Y-Yo... no te lo vas a creer, pero un zorro me robo mi pulsera - Dije levantandola- y me trajo hasta aquí y yo no, osea no quería molestar, pero , a ver deja que me explique- Por alguna extraña razón no era capaz de apartar mi mirada de la suya, había visto esos ojos antes pero no se donde- No digo que el zorro me dijera que viniera hasta aquí si no que me miraba con unos ojos azules que me engatusa......- No pude terminar la frase cuando mi cabeza encajó todas las piezas, los ojos de aquel chico que parecía tener unos 21 años eran los mismo que los de aquel zorro blanco.
-Soy Isaac - Dijo apoyándose en el marco de la puerta .
-Yo... esto ... Kian ...- Dije casi en un susurro agachado la cabeza y tapando mis ojos con mi pelo.
-Oye, creo que venir corriendo a buscarme es algo tierno - Dijo dejando escapar una pequeña y tierna risa calida- pero te has despeinado por el camino, tienes todo el pelo sobre la cara Kian-
-Oh, no es que me haya despeinado me gusta asi- Esto me estaba recordando a mi madre.
-Al menos me gustaría verte los ojos aunque fuera un solo segundo - Dijo haciendo un pucherito.
Tomé mi flequillo y lo aparté dejando ver mis ojos claros unos segundos, luego me volví a tapar.-Ya ... contento- Dije algo nervioso.
-Sí, aunque a mi me parece que sin el pelo - Dijo pasando su mano por mi rostro, apartando me todo el flequillo de la cara y rozando con la yema de sus dedos mis cejas, mi nariz y mi labio, para dejar todo a un lado y descansar la palma de se mano contra mi mejilla - Estas mejor- Terminó su frase.
Pasó un minuto en el que sólo nos mirábamos a los ojos, veía el reflejo de la puesta de sol reflejado en sus pupilas y me veía a mi, con su mano sosteniendo cariñosamente mi mejilla.
Involuntariamente o voluntariamente pero más bien fruto de un impulso agarré con cuidado y cariño su brazo con el que sostenía mi mejilla, podía sentir su calor y su piel entre la yema de mis dedos.
Isaac deslizó un poco más a tras su mano casi enredandola por mi pelo y quedándose en mi cuello de camino a mi nuca, como si no quisiera invadirme .
Me atrajo lentamente hacia él.
Nuestros cuerpos a menos de 20 cm .No se por qué coloqué la otra mano restante en su cadera y la enredé con su camiseta.
Como si me estuviera imnotizando me atrajo lentamente hacia su rostro.
Algo dentro de mí me hizo desear sentir esos rosados labios sobre los mios .
A menos de 5 cm de distancia, cuando sentía su respiración algo ladró detras de mi. La imagen de Jayce apareció en mi cabeza una milésima de segundo. Como si se rompiera un cristal retiré la mirada y me aparté lentamente.
Que acababa de pasar.Isaac puso una mano en mi hombro haciéndome dar casi un salto. No quiero que insista, iba a alejarlo cuando dijo...
-Ey, perdón, no pretendí hacerlo incomodo, de verdad lo siento , olvidalo vale... eso nunca paso- Por alguna extraña razón me tranquilizó un poco , estaba decidido a intentar responderle cuando dijo algo antes.
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My Tears Are Yours
RandomKian es el típico chico no muy popular y frikie, con pocos amigos y demasiados enemigos. Llega el verano y sus padres deciden ir a pasarlo a unas cabañas cerca de un lago, además de que han invitado a unos amigos. A Kian la idea ya le parecía mal, p...