One Shots Eunhae

Buona notte Italia

Eunhyuk

Por fin vacaciones. Llevábamos meses preparando aquel viaje. Pero en el último momento surgieron inconvenientes y se tuvo que retrasar unos días. A pesar de ello, Kyuhyun fue antes.

Ahora, montados en el avión, Leeteuk, Ryeowook, Donghae y yo, estábamos expectantes por la aventura que estábamos por vivir.

Italia... ¡¡Italia!! Solo de pensar en la comida ya se me hacía la boca agua. Bueno...La comida y para que negarlo... La intimidad. Una habitación de hotel para nosotros solos... Y eso significaba... Sexo. Si. Sexo sin interrupciones...Sexo sin cortarnos por nada...Sin tener que ir despacio o ser silenciosos... ¿Acaso sabía lo que era eso? Siempre teníamos que ir con cuidado para que no nos escuchase el resto... O hacerlo en sitios poco usuales, lo que conllevaba ir deprisa y con miedo a ser descubiertos.

No habíamos innovado mucho... Nos ceñíamos a lo tradicional... Y en este viaje yo buscaba nuevas experiencias... Bueno, ambos. Para que negarlo. Habíamos estado mirando hasta películas porno juntos para pillar ideas... La mayoría nos daba algo de reparo... Incluso algunas dudábamos que pudiésemos lograrlas... Vamos... O eras contorsionista o no se explicaba...

Todos dormían menos yo. Mi chico iba sentado a mi lado, con su cabeza recostada en mi hombro. Llevaba su chaqueta sobre las piernas. Mirarle así, dormidito e indefenso me tentó... Me mordí el labio y luego me lo humedecí. Cogí mi chaqueta y la puse imitando a Donghae, de forma que no se notase si me excitaba, cosa que pasaría en tres, dos, uno...

Introduje mi mano bajo su chaqueta y le acaricié el muslo. Luego descendí hacia la cara interior del mismo y subí hasta la ingle, topándome antes con su sexo a ese lado del pantalón. Lentamente fui masajeando esa zona, notando como paulatinamente se iba endureciendo... Fijé mi vista en su cara. Aun dormía pero de vez en cuando sus cejas se fruncían y sus labios se entreabrían.

La tensión de tener que controlar que los de alrededor no se dieran cuenta le daba más emoción.

Intenté desabrochar su pantalón pero no pude. Con una mano era difícil, y si introducía las dos se notaría lo que estaba haciendo. Suspiré frustrado y miré por la ventanilla. Estaba a punto de retirar la mano cuando sentí la suya acariciando la mía.

Giré la cabeza y me sonrió.

-Eres un niño malo...-susurró- Has parado...-apretó mi mano contra su muslo.

-Es que necesitaba ayuda.

Asintió entendiéndome y lo hizo él por mí.

-¿Por qué no jugamos juntos?-propuso.

No hacía falta que lo dijese dos veces. Desabroché los míos y dejé que metiera su mano bajo mi chaqueta.

Cuando la noté en mi miembro, me estremecí de pies a cabeza. Así, sin que nadie se diese cuenta, jugamos un rato...Lo malo... No recordamos el gran estropicio que podíamos causar... Dejamos las chaquetas para echarlas a lavar. Intentamos con unas toallitas húmedas quitar la mayor parte pero... La mancha no se iba.

Nos echamos unas risas por la cagada y doblamos las chaquetas de modo que no se notase. Claro...Al salir del aeropuerto, todos se las pusieron menos nosotros.

-¿No tenéis frío?-inquirió Leeteuk.

-Para nada.-mentí.

-No.-Donghae intentaba controlar tiritar, pero no lo conseguía.

-Donghae... No parece que no tengas frío.

-He dicho que no.-dijo serio.

-Ok.