Sin decir nada Alice se fue corriendo. Traté de alcanzarla pero Christian me detuvo. No entendía nada de lo que estaba pasando. ¿Se conocían? ¿Dónde? ¿Cómo?
Muchas preguntas rondaban por mi mente, necesitaba saber qué pasaba. Resuelvo un misterio y ya empiezo con otro. Mi vida es un tanto complicada ¿no? Primero mis padres y ahora mi antigua mejor amiga y mi novio. ¿Qué había entre ellos?
Lo miré y el bajó la cabeza. Tomé su mentón y lo hice mirarme a los ojos.
—Explícame esto —lo miré seria—. Ahora.
Pasó sus manos por su cabello y las manos le sudaban. Estaba nervioso.
Acaricié su mejilla.
—No me molestaré, solo cuéntame —Le dije está vez más calmada.
Me tomó la mano y me encaminó a 'Starbucks'. Entramos, nos sentamos en una mesa, y pedimos unos frapuccinos.
— ¿Ahora si? —le pregunté. Asintió con la cabeza.
Entreabrió la boca para empezar a hablar, agradecí a Dios por eso. Las ansias me comían, y nos nervios ya me mataban.
—Yo la conocí mucho antes de conocerte a ti —tragó saliva—. Había escuchado sobre ti, pero no te conocía. Ella y yo éramos muy buenos amigos. —Hizo una pausa larga y me preocupé.
— ¿Y qué pasó? —pregunté.
—Yo si sentía que ella estaba rara. Y que sus miradas hacía mi no eran las mismas. Pero yo no sentía lo mismo. —Me contó.
—Christian, no entiendo nada. —Le dije. Estaba demasiado confundida. Era como si él no me escuchara.
Decidí dejarlo hablar sin preguntar más.
—Luego yo te vi en el parque, y fue como amor a primera vista. Tu belleza me impacto, tu sonrisa, todo de ti era perfecto. Pero no te conocía. —Suspiró, me sonrojé.
Se detuvo y tomó de su frapuccino, imité su acción. Me miró y comenzó a hablar de nuevo.
—Ella nunca me había hablado de ti. Ni siquiera sabía que ella había sido tu mejor amiga. —Tomó un respiro—. Después de haberte visto en ese parque estabas todo el día en mi mente _______, no dejaba de pensarte.
Lo vi con ternura, y acaricié su mejilla. El bajó la cabeza.
—Días después, ella llegó a mi casa. Me pareció extraño, porque ella me había confesado que mi papá le daba miedo. —Reí en mi interior—. Lo que más me impresionó fue lo que me dijo, después de tanto tiempo de amistad. Ya no iba a ser lo mismo. —Lo miré extrañada.
— ¿Qué dijo? —pregunté. Lo miré ansiosa.
Tomó de nuevo de su frapuccino. Quizás el quería matarme con las ansias.
—Me dijo que estaba enamorada de mí. —Me impresioné, ¿ALICE? —. Yo había sentido una atracción por ella, pero tú me dejaste perplejo. No podía dejar de pensarte y sabía que si la aceptaba a ella le iba a hacer más daño, porque no iba a pensar en ella si no en ti.
—¿Qué le dijiste? —pregunté está vez mucho más ansiosa.
—Le dije la verdad. —Suspiró de nuevo—. Le dije que no me gustaba, que ella merecía a alguien mejor. Ella se fue sin decir nada, y más nunca supe de ella hasta hoy. Nunca me dijo porque se había ido. —Lo miré sorprendida. No podía creer todo esto. Ningún hombre la había rechazado a ella. NINGUNO.
Todos decían que ella era como la mujer perfecta. Ella me pasaba como cien metros por encima, ella me opacaba. Todos decían que ella era mucho más bonita que yo, y yo lo aceptaba. Yo también creía eso.
Pero sin embargo, Christian era diferente. Él me eligió a mí, aún sin conocerme algo lo atrajo a mí.
—Yo si sé porque ella se fue —el me miró obligándome a que le contara—. Ella me dijo un día antes de irse que un hombre la había rechazado y que ella se sentía como una inútil. Trate de hacer todo lo posible para decirle que eso no era todo lo importante en la vida, pero no me hizo caso. Por eso se fue, Christian, por ti. —Le conté.
El abrió la boca como en señal de sorprendimiento.
—¿Y es posible que venga a vengarse? —Preguntó.
Asentí con la cabeza.
—Pero no contigo, si no conmigo. Porque estoy contigo Christian.
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Besame. (Christian Beadles&Tu).
RomanceAunque tenga que pasar por fuego, estaré contigo. La historia de ___ tiene 17 años, una chica la cual esta enamorada de el amor de su vida, el que siempre amara toda su vida, el que le enseño a creer en el AMOR, y que en la vida todo puede pasar...