Lloyd y Marine se encontraban tomando el sol en el patio en unas sillas de playa. Ambos tenían lentes de sol, Lloyd no tenía camisa (todas las fangirls saltan xD) y Marine estaba en traje de baño.
-El día está genial. -Lloyd le comentó a su amiga.
-Lo sé, desearía que todos los días fueran así. -Marine dijo mientras colocaba sus manos detrás de su cabeza.
-Aquí están las limonadas. -Zane salió y se las dejó en la mesita de playa que estaba en medio de las sillas.
-Muchas gracias Zane. -ambos rubios agradecieron al unísono.
-De nada. -Zane respondió y estaba por irse.
-Zane, ¿no quieres venir? El día esta precioso. -Lloyd lo invitó.
-No soporto tanto el calor, además, Jay va a hacerme unos ajustes. -comentó el nindroide con una sonrisa tímida.
-Oh, bueno, suerte. -Lloyd le contestó y Zane se retiró.
-Salud. -Marine le tendió la limonada y chocaron los vasos al mismo tiempo.
Ambos tomaron un sorbo de la limonada, pero...
¡BUZZZZZZZZ BUZZZZZZ!
Pararon de tomar la limonada y se miraron mutuamente.
-¿Qué se escucha? -le preguntó la rubia.
-No sé, pero... -Lloyd no pudo terminar.
¡BUZZZZZZZ BIZZZZZZ!
-Ese zumbido me aturde... ¡Agh! -Marine se tapó los oídos.
-A mi también. -Lloyd también se tapó los oídos.
De pronto, una mosca salvaje aparece y se posa en la limonada de Lloyd.
-¡Ah! Que asco, es una mosca. -Lloyd la ahuyentó de su bebida.
-Vamos a matarla. -Marine sugirió mientras se ponía una bata de baño.
-Sí, vamos. -Lloyd la imitó poniéndose una camisa de cuadros verdes.
***
-Mira, aquí está el matamoscas. -Lloyd lo sacó de un cajón de la sala.
-Vente, vamos a buscarla. -Marine le hizo un ademán para que la siguiera.
Los dos se dirigieron de vuelta a las sillas de playa. Ahí seguía la mosca en la limonada.
-Uno... Dos... ¡TRES! -Marine le gritó a Lloyd y él golpeó en seguida el vaso donde se encontraba la mosca.
El vaso cayó al piso y se rompió. Pero... Oh, sorpresa, la mosca seguía volando.
-¡No le diste! ¡Ahí sigue! -Marine la apuntó.
-¡Que no se meta a la casa! ¡Cierra la puerta de la sala! -Lloyd le pidió.
Marine corrió a la puerta y justamente cuando quería cerrarla, la mosca entró a salvo a la casa.
-Vamos, tenemos que encontrarla. -Lloyd y Marine entraron a la casa, no sin antes cerrar la puerta para que no entraran más.
***
¡BUZZZZZZZ BUZZZZZ!
-La escucho por aquí. -Marine le dijo apuntando la cochera.
-¡Mira ahí esta! -Lloyd la vio volar por la cochera.
En la cochera se encontraba Jay arreglando a Zane.
-Bueno, Zane, supongo que solo te voy a arreglar unos cuantos defectos en el costado izquierdo del... -Jay fue interrumpido.
-Tiene que estar por aquí. -Lloyd mencionó interrumpiendo el concentramiento de Jay.
-Lloyd, ¿podrías irte a otro lado enano? Necesito silencio total o podría hacer algo mal con el sistema de Zane. -Jay lo fulminó con la mirada. Oh, y Hola Marine. -Jay la saludó amable.
-Hola... -Marine le respondió sin verlo a los ojos ya que seguía la mosca con la mirada.
-Es que... Hay una... -Lloyd paró de hablar.
La mosca se había posado en la cabeza de Jay.
-¿Una qué? -Jay lo miró confundido y sin darse cuenta que tenía la mosca en la cabeza.
-Jay... -Marine lo llamó. No te muevas. -repuso.
-Ehh... -el castaño los miró a ambos. Me están asustando. -repuso.
-Una... Dos... ¡TRES! -Lloyd gritó y le dio a la cabeza de Jay con el matamoscas con todas sus fuerzas.
-¡AHHH! -gritó Jay por el dolor.
La mosca salió volando a salvo, otra vez.
-¡Ups! -exclamó Lloyd con pena.
-¡¿Qué chinga*os te pasa?! -Jay gritó molesto por el dolor. (Jay, el grosero :v)
Le había dejado el cráneo rojo.
-Lo siento, Jay... Tengo que irme. -Lloyd salió de la cochera junto con Marine.
-¡Oww! -Jay se sobó su cabeza.
-¿Qué ha pasado? -Zane abrió los ojos.
-Nada... Zane... Nada. -Jay tenía una expresión de dolor.
***
-Ya la encontré. -Lloyd la apuntó.La mosca estaba la orilla de la alberca.
-Si el matamoscas no la mata, ¿qué la matara? -Marine le preguntó pensativa.
-Yo sé que la va a matar. -Lloyd sonrió. ¡NINJA! ¡GO! -Lloyd hizo spinjitsu hacia la mosca.
La mosca lo esquivó y Lloyd no se detuvo.
-¡Woah! -el rubio exclamó y cayó a la alberca.
-No puede ser. -Marine se dio una facepalm.
Lloyd nadó hasta la orilla y salió todo empapado.
-Esa mosca es inmortal. -Lloyd se sacudió como perro el agua.
-No es inmortal... Es trolleadora. -Marine rió de la desesperación.
-Espera... -Lloyd se detuvo a pensar. Si la mosca esta afuera significa... -continuó.
-Rápido, tenemos que entrar para que se quede a fuera. -Marine corrió a la casa.
Ambos corrieron a la sala y cerraron la puerta. La mosca se había quedado a fuera.
-¡Ja! ¡Toma eso! -Lloyd se burló y chocó cinco con Marine.
De la nada la mosca traspasó el cristal y entró a la casa por arte de magia. Ambos rubios abrieron los ojos con sorpresa.
-¿Qué rayos? -Marine exclamó sorprendida.
¡BUZZZZZZZ BIIZZZZZ!
-¡No puede ser! -Lloyd gruñó molesto.
-¡Jajajaja! -se escuchó una risa desde las escaleras.
Ambos se voltearon. Era Karly con su varita que apuntaba a la mosca.
-¿Prima? -preguntó Lloyd sin entender.
-Me encantó como le pegaste a Jay en la cabeza, ¡Jajaja! Lo grabe todo. -la castaña reía.
-¿Cómo sabes que le pegue a...? -Lloyd preguntó.
Entonces Karly dirigió con su varita a la mosca hasta su mano.
-¡Ella controlaba a la mosca! -Marine exclamó sorprendida.
-Tal ves. -Karly sonrió de una forma peculiar.
-¡Aghh! -Lloyd persiguió a Karly.
Karly se echó a correr.