Cole se encontraba sentado plácidamente en el sofá de la sala, sin mucho que hacer. Solo sentía como sus párpados caían poco a poco para quedarse dormido. Había dormido solo cuatro horas anoche y pensaba que era el momento perfecto para poder recuperarlas. Cuando de pronto...
-¡Buu! -Jay gritó mientras sacaba una pistola de agua y le rociaba toda la cara al peli-negro sin piedad.
El castaño se echó a reír al ver la cara de su amigo empapada.
-¡¿Qué demonios te ocurre?! -Cole gritó enfurecido mientras se secaba su cara.
-Encontré esta belleza escondida en el garaje, ¿no es genial? -el chico de cejas partidas empezó a reír como todo un niño pequeño.
-Serás idiota. Estaba por dormirme, me importa un comino tus estupideces de niño inmaduro. -el peli-negro soltó molesto mientras se levantaba del sofá y se dirigía al baño a secarse mejor.
-¡Uhh! Alguien no está de humor. -Jay empezó a reír mientras seguía a su mejor amigo.
-No, dormí solo cuatro horas anoche.
-¿Por qué? -Jay preguntó curioso desde la cocina mientras cargaba su pistola de más agua.
-Me quedé viendo The Walking Dead con Karly. -Cole respondió saliendo del baño.
-¿Y no me invitaron? Qué amigos los míos. -el castaño rodeó los ojos.
-Sabemos que tú no dejas de hablar jamás, siempre te la pasas: "Y, ¿por qué lo mató?" "¿Quién es él?" "¿Por qué no la quiere?" "¿Quién es Rick?". Harta. -contestó sinceramente el ninja de tierra.
-No lo hago a propósito, se me olvidan las cosas. -Jay limpió su arma con una toalla.
-Me dices después, ahora me quiero dormir. -Cole comentó mientras se recostaba en el sofá.
Colocó su cabeza en la almohada del sofá y jamás se había sentido tan cómodo. Cole empezó a caer en el sueño, otra vez. Había sido tan rápido. Sus párpados pesaron y estaban por cerrarse una vez más, pero...
-¿Has escuchado a Twenty One Pilots? -escuchó la fuerte voz de Jay y lo hizo volver a abrirlos.
Jay se encontraba sentado en el suelo a un lado de él y recargado en el sofá con su celular. Era por eso que había escuchado su voz tan fuerte, estaba a lado de su oído.
-No, ni me interesa saber nada de eso. -Cole suspiró. -Aléjate, ¿quieres? Estás muy cerca. -continuó volteándose al otro lado del sofá dándole la espalda al otro ninja.
-Su música es genial, Karly me sugirió sus canciones y ahora me gustan. -escuchó la voz del castaño un poco más baja ya que se había volteado.
-Mhum... Lo que digas. -murmuró el mayor para volver a cerrar los ojos.
Volvió a cerrar sus ojos. Jay se había callado por un buen rato, pensó que ya se había ido, entonces...
-Parece que solamente son dos. -Jay volvió a hablar y Cole podía jurar que sentía su voz en su oreja.
El peli-negro abrió los ojos y se encontró al castaño a un lado suyo muy cerca , otra vez, buscando cosas en su celular. Se había cambiado de lugar también.
-No sé de qué hablas, ni me interesa. -Cole gruñó mientras empujaba a Jay para que se alejara un poco.
-En la banda que te digo, solo son dos chicos. -Jay no despegaba su mirada del celular.
-Entonces es un dúo, no una banda. -el peli-negro balbuceó con los ojos cerrados.
-Es lo mismo, tonto. -el de ceja partida rió.
Cole lo ignoró y se dejó llevar por el sueño, otra vez. Estaba por irse en su sueño...
-¡Mira! ¡Acaban de sacar una canción hace como dos semanas!
-Cállate, ¿quieres? ¡Ya cierra tu maldita boca! -el mayor se levantó molesto y empujó a su mejor amigo hasta el otro sofá.
Ya habían pasado cinco minutos desde que el castaño se había callado y Cole supo que ya no habría problema con él. »Al fin, dulce descanso«
-Se llama Heathens, por si querías saber. -Jay volvió a hablar por milésima vez.
-Me rindo. -el mejor amigo de Jay se levantó y se dirigió a su habitación.
-No te vayas. -Jay murmuró triste, pero el otro lo ignoró.
Cole caminó como todo un zombie y subió las escaleras de manera tonta. Al entrar a su cuarto, se tiró en su cama y por fin sentía la paz. Decidió buscar el sueño, pero ahora ya no lo encontraba. Después de otros cinco o diez minutos, volvió a encontrarlo. Estaba muy relajado preparado para dormir, era perfecto, en unos segundos caería...
-Creo que me obsesioné con esta banda, jeje. -pudo escuchar esa voz tan familiar.
Cole abrió los ojos y vio a Jay acostado a un lado suyo.
-¡Déjame dormir, Jay! -Cole le gritó tan molesto que parecía que sus ojos se le salían.
-Nunca. -el castaño le sonrió mientras ponía música de la banda a todo volumen.
***
Ok, me obsesioné con Twenty One Pilots 😂💙