Ya eran las 2:30pm, Stuart no pudo volver a dormir después de lo que había ¿Soñado?.
Sentía que su cabeza daba vueltas y vueltas, se sentía mareado, asqueado y cansado.
-Si es lo que debe ser, ¿Lo será dando dolor?
Un dolor de cabeza le vino sorpresivamente. Pero Stu estaba lejos de las pastillas, se agarró la cabeza con ambas manos mientras caminaba hacía el baño, lamentablemente no pudo llegar a su destino.
El peliazul volvió a aparecer en aquel lugar oscuro con el espejo, esta vez estaba seguro de que no era un sueño.
-¿Ahora porqué estoy aquí?
-Cambiemos, Stuart...
-¿Qué? Estás loco, no te dejaré mi cuerpo...
Migräne apareció dentro del espejo frente al peliazul, ya saben, con la típica sonrisa terrorífica.
-¿Porqué te apareces cómo un yo malévolo?
-Es la única forma que conozco, ahora, cambiemos...
-¡Que no!
-Cambia conmigo...
Del coraje el ex vocalista le dio un puñetazo al gran espejo, sin importarle que se rompiera o que le sangrara la mano. Pero Migräne no paro ahí, se volvió a aparecer frente a él, aunque esta vez fuera del espejo; Sin dejar esa sonrisa macabra que lo identifica.
-Stuart, cambia conmigo...
-¡No! ¡Ya te dije que no!
Migräne se acercó hasta Stu, quedando cara a cara, después y sin que nadie lo esperara, abrazó al Peliazul.
-Migräne...
-Stuart, nunca confíes en mi...
-¿Porqué?
-Sólo soy un maldito bipolar, psicópata, que es más malo que la leche cortada y que no puede cambiar...
Migräne se separó de Stuart, para después dar dos pasos hacía atrás y sonreír de la única manera que conocía. Cuando Stuart intento avanzar hacia él, su rostro golpeó contra lo que parecía un cristal.
-¿Otra vez el espejo?
-Intenta salir de el...
-¿Qué?
En definitiva, ahora quien se encontraba dentro del gigantesco espejo era Stuart. Algo que no le agrado del todo.
-¡Sácame de aquí!
Detrás de Migräne apareció una especie de pantalla enorme y oscura.
-¿Qué es eso?
-Verás, te daré el privilegio de ver todo lo que ocasione y si me encierran en prisión, te regresare tu cuerpo, al fin y al cabo... Ya no me servirá para nada...
Stuart golpeaba con coraje aquel cristal, pero era mucho más resistente que el anterior, tan sólo veinte puñetazos lograban hacerle una grieta apenas visible. Migräne se acercó al espejo sin dejar de sonreír.
-Suerte...
-¡Espera! ¡Espera!
Migräne desapareció de ese lugar, fue ahí cuando la pantalla se encendió, efectivamente, el Peliazul podía ver a través de sus propios ojos, pero de nada serviría si se encontraba encerrado.
-(¿Probando? ¿Probando? ¿Me escuchan ahí dentro?)
-Acaso ¿Me hablas a mi?
Contesto Stuart a aquella voz, que era su misma voz.
-(Te explicaré algo, nosotros podemos charlar, mientras yo este pensando, de igual manera puedes escuchar todo lo que decimos yo y las personas con las que hable)
-¡Déjame salir de aquí!
Stuart comenzó a golpear de nuevo el cristal con rabia, no quería estar ahí para ver lo que ese loco haría con su cuerpo.
En ese momento alguien tocó la puerta. Migräne se dirigió hacía ahí y por el mirador de la puerta (osea el pequeño agujero ese) vio a la pequeña vecina llamada ____.
-¡____!
Gritó el Peliazul aún encerrado en su propia mente, aprisionado por el intruso.
-(Oye Stuart, ¿Es cierto que ella esta enamorada de ti?)
Pensaba Migräne, para poder comunicarse con el encerrado Stuart.
-De hecho ya andamos, pero ¡Eso no te incumbe!
-(¿Sabes?, Hace mucho tiempo que no siento una cavidad vaginal)
-¡No seas asqueroso! ¡Y no te atrevas a lastimarla!
-(No lo haré, sólo tendremos sexo rico)
-¡No con mi cuerpo!
-(Claro, por alguna razón, se me antoja hacerlo con ella)
-¡Noooo!
Antes de que ____ se fuera, la puerta se abre y un individuo la invita a pasar. A lo que ella accede sin problema.
-Hola Stu...
Migräne no contesto, puesto que aún no estaba acostumbrado todavía a que debía reaccionar al nombre del cuerpo que esta usando.
-¿Stu?
____ le tocó un hombro a lo que finalmente reacciono.
-¿Qué paso?
-Te saludé, pero parecías ido...
-¿Qué? Ah, lo siento, tuve una pésima noche con sueños extraños y toda la cosa...
-¿Estás bien?
-Si, si, no es nada de gravedad...
-Me alegro...
-Ven, siéntate, ¿Gustas un vaso con agua?
-Si, gracias...
____ tomó asiento en un sillón, mientras Migräne se dirigía a la cocina y atendía la petición de la chica.
-(Vaya que si estoy actuando igual de idiota que tú)
-¡Migräne, cuando salga estarás en problemas!
-(¿Qué harás? ¡¿Golpearte tu mismo?! ¡Hahaha!)
-Ella se dará cuenta de que no soy yo...
-(No mientras use tu cuerpo)
Migräne llevó el vaso con agua y tomó asiento a un lado de ____.
-¿Y eso qué no fuiste a la escuela?
-Me desperté tarde...
-Que raro, no es habitual en ti...
-Lo se, pero dime ¿Tú porqué no fuiste a la escuela?
Migräne se quedo pensando un momento, en lo que intentaba sacar algo de información.
-(¿Porqué no fuiste?)
-¡No te diré! ¡Arréglatelas solo!
Al notar que no reaccionaba, ____ lo empujó un poco.
-No fui porque me sentí muy mal...
Migräne, dejó el vaso en la mesita de centro, se acercó a ____ y la tomó de las manos.
Algo que provocó que se sonrojara ligeramente.
-____, te agradezco mucho el que hayas limpiado el desastre que cometí...
-E-esta bien, n-no hay problema...
-Permíteme compensartelo...
Poco a poco Migräne se fue acercando a los rosados y carnosos labios de ____.
Logrando de esa manera un beso muy apasionado. Migräne la jaló más a él, pegándola a su cuerpo y abrazándola mientras la besaba. ____ ya estaba en extrema sonrojada.
En la mente de Stuart, el peliazul, al ver lo que estaba pasando inicio una nueva oleada de puñetazos hacía el pobre pero resistente cristal.
-¡____! ¡No!
-(He ganado, Stuart)
La ira de Stuart se calmo cuando vio que Migräne había logrado acostar a ____ en el sillón, quedando él por encima. Normalmente todos saben que pasa después de eso y como si se reiniciara algún programa, la ira del Peliazul volvió en si, que continuo golpeando.
-¡No lo harás! ¡Si yo, que soy dueño del cuerpo, no me he acostado con ella, mucho menos lo harás tú, que eres sólo un parásito!
-(Ya es tarde)
Migräne ya estaba llegando a la etapa del "tocó y tocas" con ____, que seguía sin darse cuenta de que él, no era él. Tal vez el amor no le permitía ver.
-¡____! ¡____! ¡____!
La furia aumentaba cada segundo, el cristal se estaba abriendo y las manos ensangrentadas no paraban ni un segundo.
-¡____! ¡____! ¡__________!
Con ese ultimo golpe se rompió aquel cristal y el desesperado gritó del Peliazul sorprendentemente pudo ser escuchado por los oídos de la chica, quien inmediatamente paró la situación.
-¿Escuchaste?
-¿Qué cosa?
-Alguien gritó mi nombre...
-Yo no oí nada...
Migräne trato de volver a acostarla, pero ella se levantó de ese lugar.
-¿Qué tienes?
-Es que, estoy segura que alguien gritó "_________"...
Migräne se quedó pensando un momento, aprovechando que la chica estaba un tanto distraída.
-(¡¿Tenías que arruinarlo todo?!)
-No dejaré que la toques...
-(¡Que patético eres! ¡Deja de joder un momento! ¡¿Quieres?!)
-No...
Migräne sintió un dolor punzante en su cabeza, intento resistirlo, pero poco a poco se hacia cada vez más insoportable. Hasta que comenzó a retorcerse mientras sujetaba su cabeza con ambas manos, ese dolor intentaba regresarlo al espejo.
-¡Stuart!
____ corrió al baño, donde la mayoría de la gente guarda las medicinas y tomó el frasco de pastillas contra la migraña. Para regresar al instante a donde el Peliazul se encontraba.
-Toma Stu...
____ le extendió gentilmente dos pastillas en su mano, pero Migräne las tiro al suelo, al igual que el frasco. Si tomaba aunque sea una de esas pastillas, dormiría al menos 3 o 4 horas, obviamente no le convenía ni un poco.
-Tranquilo Stu...
-¡Cálmate!
Gritó Migräne, ya no podía más. ____ retrocedió cuando Migräne la miró y le saltó encima, despojando sus ropas de su cuerpo.
-¡No Stuart! ¡Detente!
-No hay tiempo que perder...
Migräne tomó la cara de maniático que lo identifica más que perfecto, fue ahí cuando ____ se dio cuenta de con quien estaba tratando.
-¡Para! ¡No lo hagas!
Como podía, la chica intentaba no ser violada por el doble malévolo del Peliazul.
Se retorcía intentando liberarse, pero su delgado cuerpo no podía contra la fuerza de un hombre.
-¡Ayuda! ¡Ayuda!
En ese momento la puerta se abre de golpe y revela la silueta de un hombre alto.
Migräne lo reconoce y sonríe de tal manera que el hombre también lo pudo reconocer y al ver lo que estaba intentando hacer, se lanzo contra él.
____ se cubrió con sus ropas, observando como aquel hombre le daba una buena golpiza a Migräne, quien quedo tendido en el suelo, sangrando de la nariz y la boca, para después quedar inconsciente. El hombre se acercó a la chica que se veía sumamente sorprendida por lo que acababa de ocurrir.
-¿Está usted bien? Señorita Dohrt...
____ abrazó a aquel hombre muy fuertemente, quien la pegó a su cuerpo mientras la abrazaba, aunque con otros propósitos más repulsivos.
-Gracias por salvarme maestro Jacobo...
Así es, Jacobo, que siempre que ____ falta a clases, la visita para entregarle un reporte sobre las actividades generales que realizaron en su día de ausencia para que de esa manera no se atrase.
Esta vez, que no era la excepción, mientras pasaba por el pasillo se sorprendió bastante al escuchar la voz de su amada salir de un departamento extraño y no dudo ni un segundo en ayudarla cuando comenzó a pedir auxilio; así como tampoco se esperaba que el joven Pot viviera junto a ella o que al menos se atreviera a cometer semejante barbaridad. Cuando se separaron, el maestro le dio la espalda a la chica que aprovecho para vestirse rápidamente. Una vez lista, se acercó a limpiar la sangre de aquel rostro tan lindo perteneciente al ex vocalista de Gorillaz.
-Señorita Dohrt, ¿Qué sucedió aquí?
-Nada grave es sólo que...
-¡¿Nada grave?! Perdóneme señorita Dohrt, pero fue atacada y por poco violada por este... Tipo...
La interrumpió el maestro, mientras fruncía el ceño y hacia gestos de repulsión hacía el joven inconsciente. ____ lo miró sin tener ninguna expresión en su rostro.
-Este tipo, maestro Jacobo, no es más que mi novio...
De pronto, dentro del cuerpo de Jacobo, se escuchó como algo se rompía mil veces. Eso era algo que no se esperaba en lo más mínimo, su corazón y el mundo entero se desvanecían ante él. Pronto veía como ____ le quedaba cada vez más lejos de alcanzar.
-Lo que ocurrió no fue más que un malentendido...
Continuo la chica, que ya había regresado a seguir limpiando el rostro de su pareja y dándole la espalda a aquel hombre que, aunque no se notará, estaba destrozado; Aún así, no se quedó con la duda de preguntar algo que lo intrigo bastante.
-Señorita Dohrt...
-¿Si?
-Cuando golpee a su...
Jacobo se detuvo, no podía pronunciar aquella palabra que le daba repulsión y que ha estado esperando años a que se relacione con él, pero que aún así no ocurre.
-Continúe maestro...
-Noté algo negro alrededor de sus ojos, creí que se maquillaba con sombras o algo así, pero ahora que lo observó con los párpados cerrados me doy cuenta que no es así...
Jacobo se acercó hasta ellos, donde ____ estaba más que nerviosa, pues no sabía que responder. Cuando el maestro intento abrir uno de los ojos del Peliazul, ____ le sujetó la mano muy fríamente para después mirarlo y sonreír de una manera gentil.
-Gracias por venir, pero si ya no tiene nada más que hacer aquí, le pido que se retire por favor...
-¿Qué?
Sin soltarlo, ____ lo jaló hasta la puerta donde le invito a salir.
El maestro no sabía si retirarse o no, pues no confiaba en aquel chico y menos con lo que acababa de ocurrir.
-Que le vaya bien maestro...
Cuando ____ estaba por cerrar la puerta, el maestro toma de la mano a la chica y la jala para abrazarla.
-Espera _____...
_____ se sorprendió bastante al escuchar su nombre salir de la boca de su maestro, quien siempre le había hablado por su apellido y muy respetuosamente.
-No quiero que te vaya a ocurrir nada, por favor, permíteme quedarme...
-Jacobo...
Al escuchar como su amada pronunciaba su nombre con su linda y dulce voz, el corazón de Jacobo se reconstruyo y la abrazó aún más fuerte.
-Te ayudaré a ordenar el departamento o lo que tú quieras que haga, pero por favor...
_____ se separó de aquel señor, pensó un momento, pero en algo tenía razón, podría ser útil tener a un hombre de más, aún así, le puso condiciones que se aseguraría de que cumpliera.
-Esta bien, pero tiene que cumplir algunas condiciones...
-Las que quieras...
-Primero, no quiero que se le acerque a Stuart para nada, yo seré la que lo atienda personalmente...
-De acuerdo...
-Segundo, no quiero que le mencione nada de lo que ocurrió a Stuart...
-Entendido...
-Tercero, si pregunta que hace usted aquí, no le dirá que pasó el día...
-Ok, ¿Algo más?
-Si, no vaya a hacer cosas extrañas por favor...
-Tranquila que eso no pasara, soy tu profesor niña...
Sin más, y al ver que había aceptado todas las condiciones propuestas, ambos entraron al departamento. La noche ya casi llegaba y con la ayuda de aquel hombre, ____ inicio la limpieza del desorden, aunque si estaba un poco nerviosa por la presencia acosadora de Jacobo.
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Amor Maldito: 2-D y Tú
FanfictionSu amor no es para nada funcional. Cuando se conocieron, no imaginaban que su vida comenzaría con tragedias. Un maestro de mente enfermiza, amistades hipócritas, dos amores sinceros y la doble personalidad de tu novio. ¿Su mejor amiga? La muerte...