Muérdeme lo que quieras pero no me dejes ir.
Se me ha vuelto una necesidad el sentir tus dientes casi lastimándome los labios, no aguantó el deseo de sentirlos rasgándome la pieL, cual animal devorando a su presa. Y es eso lo que yo quiero ser para usted.
Mi ángel te voy a corromper la imagen de inocencia que emanás, quiero que saques hacia afuera eso que veo en tus ojos, para mi. Sólo para mi.