XIV (Sin editar)

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Tobias POV

Me despierto con mucho miedo, me siento en la bolsa de dormir y pienso en todo lo que hemos tenido que pasar; el padre de la chica que amo, esta muerto, perdimos la base y Valentina ya no esta con nosotros. Después de todo esto, no sé  cuanto tiempo resistiré a este Apocalipsis, ¿Así debería llamarlo? ¿Este es el fin? No me siento listo para asumirlo con ese nombre, tal vez no debería denominarlo así todavía, aunque todo apunta a que sí, ya no hay nada por que luchar...
¡No! Me digo a mi mismo, si hay algo por lo que debo y debemos luchar, que tonterías estoy pensando. Debemos luchar por sobrevivir. Ganarnos un lugar en este maldito mundo.
Me levanto del mueble y me dirijo al baño, observo por la ventana, hay algunos caminantes en la calle, estas estan sucias y llenas de basura, en el cielo se logra ver que el sol esta por salir, aún hay humo, y a lo lejos se ve una llama de fuego, mientras asaltaron la base, algunos tiraron granadas y eso provocó que haya un incendio.
Observo a una pequeña niña infectada al otro lado de la calle, inmediatamente me acuerdo de Valentina, alejó ese pensamiento de mi mente y sigo mi camino al baño.
Entro y compruebo si hay agua o no, para nuestra mala suerte, no hay, asi que salgo del baño, al abrir la puerta me encuentro con Abigail, sus ojos estan rojos, debe haber estado llorando varias horas, me acerco a ella y la abrazo.

-No puedo -dice ella suavemente

Yo la miro extrañado, ¿que quiere decir con eso? veo su mano, tiene una pistola, ya sé a que se refiere. Se quiere matar.

-No, no permitiré que hagas eso -digo fuertemente, de seguro todos me han escuchado-. Dame el arma

-No, mi padre ha muerto, ya no tengo nada porque vivir, sera lo mejor -dice mirando el arma que lleva en su mano.

-No, tenemos que luchar por sobrevivir, no te puedes dar por vencida, tenemos que pelear -le digo mirándola a los ojos-. Dame el arma.

Ella lo piensa por un momento, pero luego me la da, yo la abrazo para luego darle un beso.

-Yo te protegeré, saldremos adelante. Juntos -le digo apartándole un mechón de la cara.

-Tengo miedo -alcanza a decir.

-Tranquila. Tranquila -la abrazo suavemente de nuevo.

Nos separamos y ella va al baño, yo camino hacia la ventana.
La niña que vi hace un rato aún sigue ahí afuera, pero se empiezan a escuchar disparos y la niña se voltea, al igual que todos los caminantes y se dirige hacia el origen del disparo.
Todos actúan como animales, al oir, oler o sentir a su presa inmediatamente dejan de hacer lo que están haciendo y se dirigen hacía él. Vaya mierda.
Me volteó y camino de regreso a mi bolsa de dormir, todos estan en sus bolsas de dormir, aún durmiendo, excepto Abigail, pero noto que Sebastian tampoco esta.
Abigail sale del baño, tiene los ojos rojos, debe haber seguido llorando en el baño.
Le pregunto si ha visto a Sebastian, ella dice que se despertó en medio de la noche y salió.
La abrazo nuevamente y le digo que trate de dormir un rato, seguido de esto salgo hacía donde estan las escaleras, pienso en donde puede estar Sebastian, él una vez me dijo que le gustaba observar el amanecer. Claro, debe estar en el techo.
Subo por las escaleras hasta el ultimo piso, en él hay unas escaleras de metal en la pared, subo por ella y alzo la tapa metálica que hay. Por suerte Sebastian estaba ahí, sentado, con la mirada al horizonte, esperando al sol, el cual ya estaba saliendo.

-¿Qué haces acá? -le digo, haciendo que se sobresalte

-Oh, eres tú -dijo volviendo la mirada hacia el horizonte-. Estaba mirando el amanecer, me gusta.

-¿Y por qué te gusta tanto observar el amanecer? -digo mientras me acerco para sentarme a su costado.

-Me gusta porque es cuando el sol sale y eso significa que un nuevo día comienza para mí y para muchos, es un nacimiento de algo y todo nacimiento representa una nueva vida, una nueva esperanza con todo lo que ella implica nuevos ptoyectos, nuevas inquietudes, nuevas miras, nuevos sueños, nuevos incentivos. Es hermoso ver el amanecer con esos colores que se manifiestan en ese inmenso firmamento, sentir que el mundo despierta, que este empieza a palpitar con toda la energía, ver el movimiento de la gente caminando hacia sus trabajos, niños a la escuela, adoraba ver eso y ahora lo extraño. -dice sin dejar de mirar el sol que ya esta saliendo-. Hacía esto antes con mi papá, él murió hace 2 años, un ladron le quiso robar, él se resistió y el ladron le disparó en el estomago, lo llevamos al hospital pero cuando llegamos ya había fallecido. -dice soltando algunas lágrimas.

El fin de los días [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora