En punto de las 5:00 a.m. el autobús partiría a su destino. Diego quiso llegar 15 minutos antes para apartar dos lugares cómodos, con buena vista al paisaje, se sentó, observaba a los chicos y chicas que llegaban, se encontraba impaciente, la sensación se la había vuelto al estomago, ni si quiera el sabia que le ocurría, miró el reloj eran ya las 4:55 a.m. Se preguntaba a cada segundo si Lucy no llegaría, la conocía perfectamente, era casi su propia vida, su hermanita querida, aunque era mayor que el por 3 meses, se sentía el mayor, disfrutaba de aconsejarla, protegerla, sabía que era una dormilona y tenía miedo de que se hubiese quedado dormida.
Se asomó por la ventanilla, estaba dándose a la idea de que su Lucy no llegaría, pero la miró corriendo, sonrió lleno de emoción.
-¡Diego! Llegué tardísimo, mira qué hora es (4:59 a.m.) discúlpame.
-No pasa nada Lucy, ¿tienes sueño dormilona?
-Sí, muchísimo a decir verdad, me desperté hace una hora
-¿Tu? No te creo esa no es mi Lucy, mi osita invernadora- se burló cariñosamente
-Aunque no lo creas Dieguito
-Duérmete-le contesto muerto a risas. Llegaremos a las 11 o 12 a.m.
-Sí pero… Primero me gustaría escuchar un poco de música, ya sabes para relajarme
- ¿The Beatles?
-Sí, que mejor que escucharlos
-Esa es mi Lucy aprendiste bien de mi
-Si si claro, anda ya ayúdame a desenredar mis audífonos, y toma uno, escucharemos lo mismo
-Me leíste la mente, mi celular se descargó
La melodía comenzó... y como es costumbre los dos amigos comenzaron a cantar
-Close your eyes and I’ll kiss you, tomorrow I’ll miss you- Comenzó Lucy
-Remember I’ll always be true- Continuo Diego
-¡Que canción! Es Hermosa
-¿Que esperabas de la mejor banda de rock?
-All my loving, The Beatles
- Una de sus canciones más románticas
Así pasaron varias horas, cantando y charlando, hasta que a la dormilona Lucy le vencía el sueño, no pudo mas, el sueño la dominó, lentamente se fue recostando en el hombro de Diego. El calurosamente respondió al gesto acariciando su cabello, cosa que no había hecho antes pero no pudo resistir -¡Que suave cabello tiene!- pensó, cuantas cosas no había descubierto de ella, besó tiernamente su frente , la miró y en su mente pensó: ¡Cuánto la quiero! Pero enseguida se preguntó: ¿en realidad la quiero? ¿Hay algo más? ¿Qué es ella para mí?
Vamos Diego no vas a pensar que lo que tanto te dice Osvaldo es verdad, no te habrás enamorado de ella quédate tranquilo ¿o sí? No no ya basta de pensar esas cosas. Estoy loco como me atrevo a creer que la amo, solo la quiero y ya eso es todo. –Pensó Diego sacudiendo su cabeza confuso-
-Lucy, hemos llegado, despierta dormilona.- Dijo sacudiendo a su amiga tiernamente
-¡Qué rápido! ¡Me quedé dormida!
-Sí, lo noté, por cierto Lucy ¡que preciosos son tus ojos cuando recién despiertas! No había tenido la dicha de verlos así
-Pues gracias-. Dijo enrojecida
-No pongas roja mi Lucy.- Respondió al ver el rostro de la chica
-Lo siento Diego
-No te disculpes por tener esos ojos tan hermosos
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Lucy en el cielo con diamantes
Teen FictionCada momento de la vida adolescente de Lucia es identificada con una canción de la banda británica The Beatles, con ella viviremos un amor, un amor que termina por una enfermedad, amistades que perduran, con misterio y humor sabremos que la vida es...